El PSdeG-PSOE de la provincia de Pontevedra expresó ayer su "perplejidad" ante el anuncio de la Xunta de Galicia de que está dando nuevos pasos para la puesta en marcha de los obligados planes de emergencia de cuatro embalses de la provincia de Pontevedra: A Baxe (Caldas de Reis), Eiras (entre Ponte Caldelas y Fornelos de Montes y que abastece a la ciudad de Vigo y su área), O Con (que abastece el área de Vilagarcía) y Baiona.

El Diario Oficial de Galicia publicó el pasado 24 de septiembre la declaración de urgente ocupación de los terrenos necesarios para la instalación de los elementos de gestión de las emergencias relacionadas con una posible rotura o avería en los embalses, como salas de gestión o sistemas acústicos. Una obra que, a pesar del retraso acumulado, financia con fondos Feder.

El secretario general de los socialistas pontevedreses, David Regades, criticó la "dejadez en la protección de la población", pues asegura que la legislación que obliga la aprobación de estos planes data del año 1995 (Directriz Básica de Planificación de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones) y de 1996 ( Reglamento Técnico de Seguridad de Embalses).

Ejemplo "pésimo"

El socialista cree que son medidas que"llegan con 23 años de retraso, dando un ejemplo pésimo por parte de una Administración que se apresura a multar a otras administraciones, empresas y ciudadanos cuando incumplen plazos en asuntos de muchísima menos importancia", afirmó David Regades.