El alcalde de Portas, Ricardo Martínez, mostró ayer su satisfacción por el "apoyo" e "interés" de la Consellería de Medio Ambiente con respecto al proyecto de la Vía Verde do Salnés, frente a las críticas que en los últimos meses han profesado contra la Xunta los regidores de los otros dos municipios que atraviesa el sendero (Vilagarcía y Caldas).

El regidor popular se congratula así del resultado de la reunión mantenida el lunes con la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, que ya en diciembre de 2018 envió un convenio de colaboración a los tres concellos, según el relato del Gobierno gallego.

Martínez agradece "la comprensión de la administración autonómica ante la preocupación de este concello tras quedar descolgado del proyecto que acometió la Diputación de Pontevedra con los otros dos ayuntamientos".

"Nos reuniremos con la directora xeral de Patrimonio Natural, Belén Docampo, con el objetivo de analizar qué es lo que queda por hacer del proyecto inicial y firmar un nuevo convenio que permita concluir la Vía Verde y que así ponga fin a la situación anómala que supone que la Diputación segregase a Portas del proyecto", espeta el regidor del PP.

Ricardo Martínez agradeció a los municipios de Vilagarcía y Caldas que aceptasen que la aportación de los concellos varíe según su población y tramo de vía con la que cuenta cada uno. "El 10% que asumiría cada ayuntamiento en el primer convenio se vería reducido en el caso de Portas", aplaude.