El casco histórico está indignado por la proliferación de basura en sus calles y plazas. Tanto que han decidido denunciar públicamente estas pésimas condiciones de salubridad. Primero fueron los vecinos y los hosteleros, afectados de forma directa. Y ahora son los comerciantes, que han solicitado al Concello de Pontevedra, a través del Centro Comercial Urbano Zona Monumental, una limpieza "a fondo".

La cuestión es que están hartos de la imagen que se da de la ciudad, pero, sobre todo, de la "suciedad insorportable" y los "olores nauseabundos" que ésta genera.

El colectivo, presidido por Miguel Lago, recuerda, asimismo, que abundan los contenedores de basura rotos, que empeoran el desastre.

Aseguran que llevan ya dos meses realizando esta petición al gobierno local y que no se han visto acciones que hayan mejorado la situación, que con las altas temperaturas del verano se agrava.

Se trata de una cuestión de salud, pero también de frenar una estampa pésima de la zona monumental, la más frecuentada de la ciudad por el turismo.

Analizar las necesidades

Una vez al tanto de la situación, el Concello asegura que reflexionará sobre ello, aunque aguardará a que pase el verano para saber exactamente cuáles son las necesidades del casco histórico pontevedrés.

La portavoz del gobierno municipal, Anabel Gulías, avanzó ayer que estudiarán todas las demandas de vecinos, hosteleros y comerciantes de las últimas semanas y que se las trasladará a los servicios técnicos para saber con exactitud qué pudo haber provocado los problemas.

La portavoz, también concelleira de Promoción da Cidade, achaca buena parte de la situación a que el mes de agosto ha sido de "récord" en la Boa Vila, con una afluencia importante de turismo, lo que ha provocado un incremento de la actividad en todos los sectores, incluido el hostelero.

En este sentido, consideró que la mayor acumulación de basura se produce junto a los propios contenedores de basura.

La intención del Concello es analizar todos los incidentes y realizar un seguimiento. Así, llegado el caso, se podría estudiar la necesidad de reforzar el servicio de recogida de basura, aumentar los contenedores existentes en la actualidad o cambiar sus ubicaciones para un mejor funcionamiento.

Recordó que la actual distribución es el resultado de un proceso consensuado en su momento con los vecinos, hosteleros y comerciantes de la zona monumental.