Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Diez jóvenes atendidos, la peor cara de la "noche grande" de peñas

En el Punto Lila no hubo denuncias ni solicitudes de mujeres para ser acompañadas. La Policía hizo 400 pruebas de alcoholemia

Una peña taurina en las inmediaciones de la plaza. // R. Vázquez

La "noche grande" de peñas se saldó con 8 atenciones de las ambulancias en distintos puntos del centro histórico y tres traslados al hospital de jóvenes, 2 por intoxicación etílica y otra por contusión. Por su parte, en el Punto Lila de las fiestas atendieron a dos mujeres "en estado de desorientación por embriaguez", pero no se recibieron solicitudes de acompañamiento ni denuncias por casos de acoso o agresión.

Las incidencias fueron la peor cara de una noche que, por lo demás, resultó tranquila en comparación anteriores ediciones, una percepción unánime ayer entre la hostelería y el Concello, cuyo dispositivo de limpieza se refuerza con contenedores en la plaza del Teucro.

Es una de las medidas que vecinos y comerciantes piden que se implementen, al igual que baños portátiles y en general elementos disuasorios, como papeleras, que eviten las imágenes de mares de plástico como las que se repitieron en la plaza del Teucro. Ésta y Santa María volvieron a ser los principales puntos de concentración del botellón.

"Ha sido una noche complicada, como siempre que hay peñas, pero más por el barullo y por la intensidad que por otra cosa", señalan en el restaurante La Cámara, en el epicentro de la "noche de peñas". A unos metros, en Pontetapas, coinciden en la percepción: "para mí este año se portaron, hubo mucho movimiento, actividad y ruido, pero por lo demás sin problemas", explica.

También vivió una noche intensa una de las tabernas más antiguas del centro histórico, el bar Reixas, una de las más visitadas por aficionados y grupos de jóvenes en las noches de toros. Sus responsables explican a FARO que "todo fue muy bien, con muchísima gente y mucha animación".

Juan, agente jubilado del Cuerpo de Bomberos y vecino de la calle Isabel II, uno de los ejes de mayor actividad, coincide en la percepción: "Fai anos que os menos non se portaban tan ben. Á unha da mañá tomei o viño no Cruceiro ¡que tranquilidade¡"

Toñi, camarera en las Cinco Calles y vecina de la plaza del Teucro, es otra de las vecinas que incide en que "a mi no me molestan los niños, sino los mayores que mean en mi portal".

Y es que la incidencia sobre la limpieza de noches tan intensas es uno de los factores que más preocupa, especialmente a los vecinos, principales damnificados de una noche en la que, por lo demás, la hostelería hace una de las grandes cajas del año, en correspondencia con la jornada de arranque de las fiestas y aperturas hasta la madrugada.

"A pesar de la multitudinaria presencia de personas a lo largo del día", señala el Concello, "no se registraron incidencias de gravedad". La administración local destaca la "ausencia de peleas en toda la ciudad" y que la Policía Local llevó a cabo controles de alcoholemia, tanto de mañana como de tarde y noche, con más de 400 pruebas y con el resultado de tan solo dos positivos en alcohol y dos por drogas.

Asimismo, se produjeron varias denuncias por utilización de altavoces en la zona de Santa María, donde también fue denunciado y retirado un vehículo con música.

A mayores, en la larga tarde-noche de fiesta la Policía Local identificó a dos menores portando botellas de alcohol, que fueron incautadas, y a otras tres personas con altavoces.

Compartir el artículo

stats