Este recinto estará en funcionamiento mañana y tarde, con un máximo de 18 horas al día, entre las seis de la mañana y la medianoche, que se amplía en verano. Es el horario pactado en su día entre el gobierno local y los doce adjudicatarios. Por las mañanas, entre las seis y las dos de la tarde aproximadamente, el edificio estará abierto en su totalidad, para la compra tradicional abajo y las ofertas gastronómicas arriba, pero será por las tardes cuando esta segunda planta se convierta es un espacio gastronómico independiente.

El horario de 18 horas no tendrá que cumplirse obligatoria y permanentemente. Además, tras el primer mes de funcionamiento se celebrará una nueva reunión de valoración de este horario y de otros aspectos de la actividad. Los que no se incorporan a este funcionamiento por las tardes son los vendedores tradicionales. En su día el Concello presentó esa propuesta al colectivo, por si alguno se quería sumar y aprovechar la posible afluencia vespertina de público, pero no hay adhesiones, entre otras razones porque los vendedores abren muy temprano y no pueden cubrir todas las horas del día.