Las obras de reforma urbana obligan a cerrar la rúa do Rouco para tráfico de vehículos mañana lunes y también el martes, si bien el Concelo asegura que se permitirá el acceso a la plaza de Barcelos a residentes, garajes, servicios y al estacionamiento de la plaza durante el cierre.
Esta medida es necesaria en estos dos días debido a la fase que atraviesa la obra: la instalación de los servicios soterrados que obliga a cortar la calle para tráfico de paso.
El plan de tráfico contempla que los cierres se realicen a partir de las 9.00 horas de la mañana después de que la calle despache la circulación de vehículos de primera hora en la zona, y estará cortada hasta las 20.00 horas. En ese tiempo, se garantiza el acceso al estacionamiento
y a los vecinos y servicios, según insiste el Concello, que pide disculpas por estas molestias y afirma que la calle se reabrirá antes si las obras se agilizan.
Los vehículos de paso que tengan que circular por la calle Cobián Roffignac deberán hacerlo por Castelao y Daniel de la Sota.
La obra de O Rouco comenzó esta misma semana con la apertura de las zanjas para la instalación de las tuberías de los servicios soterrados y demolición de aceras. El presupuesto de ejecución es de 167.593,16 euros y tiene un plazo de ejecución de cuatro meses, que se podría reducir para tratar de ajustarse al inicio del curso escolar, a mediados de septiembre, cuando menos en la zona más próxima al colegio de Barcelos.
El proyecto contempla la reordenación de la calle, redistribuyendo los espacios destinados a la movilidad peatonal. Se mantendrá una línea de estacionamiento en hormigón en la margen derecha para servicios y para colocar los contenedores de basura. Esta acera tendrá un ancho de tres metros, y en el lateral izquierdo (en el del colegio) la acera se incrementa hasta los cinco metros.
La calzada será repavimentada y la acera se creará con loseta confinada entre bandas de granito. Se procederá a la eliminación de las barreras arquitectónicas y también se aprovechará para renovar las redes de pluviales y de alcantarillas. El proyecto también contempla la colocación de nuevo mobiliario urbano (cinco papeleras, siete bancos, y diez aparcabicis), y la mejora de la iluminación.
