El análisis médico y forente practicado en la noche de ayer a una menor de 17 años que denunció haber sido víctima de una agresión sexual ha determinado que la joven no presenta lesiones que certifiquen ese ataque. Aunque la Policía Nacional alberga dudas sobre la denuncia presentada por la supuesta víctima y su madre, mantiene abierta la investigación.

La madre y la hija acudieron en la tarde de ayer a la Comisaría de Marín para denunciar un supuesto caso de agresión sexual que habría sufrido la joven en las proximidades del instituto Mestre Landín de la localidad. Sin embargo, desde entonces no se ha practicado ninguna detención y las pruebas médicas no confirman todos los extremos de la denuncia.

Según la versión de la chica ante la Policía, transitaba ayer cerca del instituto cuando fue agarrada por detrás por un hombre de color de unos 40 años y con un gorro, que la arrastró al interior del centro, donde se habría consumado la agresión. Pero en sus declaraciones incurrió en diversas contradicciones que ya arrojaron dudas sobre los agentes.

Tras un primer análisis forense en la Casa del Mar de Marín, sin localizar lesiones, la joven fue trasladada al Hospital de Pontevedra para un examen más exhaustivo donde se confirmó que no hubo violación consumada.

Fuentes oficiales de la Subdelegación del Gobierno ya advertían en la noche de ayer que existía una investigación abierta tras la denuncia formulada en la Comisaría de Marín, pero aún "se están comprobando los hechos" ante las dudas policiales. Por ello, se solicitaba la "máxima cautela".