La prisión de A Lama ha vuelto a ser escenario de un incidente supuestamente protagonizado por los presos. Funcionarios del turno de noche tuvieron que hacer frente el pasado lunes a un incendio en los contenedores de residuos situados en una de las calles que separan los edificios residenciales de complejo, según informan los sindicatos Acapio y UGT.

Alertados los funcionarios por los detectores de humo, se comprobó que estaba ardiendo uno de los contenedores, precisamente el de papel y cartón, por lo que de inmediato se activó el protocolo antiincendios, y las llamas fueron sofocadas con extintores y se refrescó la zona con agua.

Los sindicatos destacan que "de este modo se evitó la propagación a los demás contenedores y una posible emergencia en los módulos residenciales debido al abundante humo que entraba por las ventanas".

Una vez constatado que la salud de los internos de la zona próxima no corría peligro, se buscó la causa y fue entonces cuando se comprobó que el incendio había sido supuestamente provocado "mediante objetos incendiarios lanzados desde las ventanas de las celdas".

Acaip y UGT señalan que "el caso está aún bajo investigación, pero parece que dichos artefactos estarían confeccionados con materiales tales como papel higiénico, botellas de plástico y calcetines, a modo de cóctel molotov".

Se destaca el "estupor y alarma" que causó este incidente "tanto entre internos como funcionarios, por las posibles consecuencias que podría haber acarreado, lo novedoso del modus operandi, y los interrogantes acerca de las motivaciones que llevaron a los internos implicados a perpetrar semejante acción".

Según sus datos, hasta ahora, la mayoría de incendios provocados por reclusos se habían originado al prender fuego a los colchones de la propia celda y se sospecha que la "finalidad de esta conducta sería aprovechar la confusión para generar algún tipo de altercado".

Los sindicatos alertan de nuevo de la escasez de efectivos en la prisión de A Lama pero destacan que "pese a ello se logró intervenir a tiempo para mantener el fuego bajo control".

Añade que "la actuación de estos profesionales, que han de estar debidamente formados, es vital en los primeros minutos de un incendio" con el añadido de que la prisión de A Lama está muy alejada de los servicios de Bomberos, que necesitan mucho tiempo para llegar hasta ella.