La denominada "Opeación Centinela Gallego", que despliega en distintas áreas de monte de la comunidad gallega a efectivos de la Brilat para evitar la proliferación de incendios forestales, comenzará este año más tarde de lo que es habitual.
Normalmente, las patrullas partían de la base General Morillo de Figueirido a las 00.00 horas del 15 de julio, pero este año todavía no se ha firmado el convenio entre la Xunta y el Ministerio de Defensa para su puesta en marcha por lo que fuentes de Medio Rural confirman que el próximo domingo a medianoche no se activará este dispositivo. Lo que se desconoce todavía es la fecha en la que se pondrá en marcha la operación, a la espera de la firma de este convenio. En la base militar de Figueirido las previsiones es que pueda activarse a lo largo del mes de agosto, a principios o a mediados de este próximo mes.
Sobre las causas del aplazamiento de la misión, no hay tampoco una versión oficial de la misma. Distintas fuentes aluden a la climatología, benigna en lo que respecta a los incendios durante el mes de junio debido a las precipitaciones, como una de las razones para no apurar al puesta en marcha del dispositivo. También se recuerda que en los últimos años, la campaña de incendios fue más virulenta hacia los meses finales del verano e incluso en octubre que a estas alturas, de ahí que retrasar el dispositivo incluso pueda ser beneficioso si se tiene en cuenta esta variable. Otras fuentes aluden a un posible retraso en los trámites burocráticos debido a que el Gobierno central se encuentra todavía en funciones.
La duración de la misión suele ser de dos meses. El pasado año se desarrolló entre las fechas habituales (del 15 de julio al 15 de septiembre) y en ella participaron más de 500 militares (en su mayor parte de la Brigada Galicia VII, pero también del Tercio Norte de Infantería de Marina en Ferrol) que realizaron labores de disuasión, vigilancia, reconocimiento y alerta temprana sobre incendios con más de 450.000 kilómetros de patrulla (unos 200 al día en coche) y medio centenar de vuelos del avión no tripulado de la Brilat, cubriendo zonas de alto riesgo en tres de las cuatro provincias.
