No hace falta más que ponerse enfermo para darse cuenta de la importante labor que tienen los médicos en la sociedad. Es por ello que el Ilustre Colegio de Médicos de Pontevedra homenajeó ayer la trayectoria de muchos de sus profesionales.

El presidente del Colegio, Luis Campos Villarino, en presencia del vicepresidente del Consello Galego de Colexios de Médicos y presidente del COM de A Coruña, Luciano Vidán, quiso aprovechar la ocasión para reivindicar la situación que viven los facultativos motivada por los recortes de los últimos años. El acto comenzó recordando con una misa la memoria de los compañeros fallecidos en el último año. A continuación, se realizó un homenaje a los nuevos 26 médicos jubilados. Del mismo modo se hizo entrega de los diplomas de colegiado honorífico imponiéndoles la insignia colegial a los médicos que han alcanzado la edad de los 70 años.

Campos Villarino destacó la labor de los médicos y recalcó la actual situación laboral. Recordó que entre 2014 y 2017 solo se han cubierto el 40% de las plazas que dejaron médicos jubilados, lo cual dejó a la sanidad gallega con 438 facultativos menos que se palian con "contratos temporales precarios y aumentando la carga de trabajo de los MIR". Indicó que no se debe cuestionar el espíritu de trabajo y colaboración del sector sanitario, pero que éste debe seguir luchando por el bien del paciente y de la profesión.

Entre otras medidas, señaló como fundamental una "reordenación y planificación, con una autogestión de las propias agendas". Reivindicando que "no se puede atender a 60 pacientes en una sola jornada". En todo momento ensalzó la figura del médico de atención primaria, señalando que "este primer nivel asistencial es el de mayor proximidad al ciudadano". Y que "una atención primaria fuerte consigue mejores niveles de salud y menor coste en la prestación de los servicios", expresó. Mostró su apoyo a que sea el profesional "quien gestione sus agendas" y reclamó "redimensionar los cupos y plantillas, teniendo en cuenta las características de la población". Por otro lado exigió la "dignificación de las guardias en urgencias extrahospitalarias, asegurando la presencia de personal y recursos suficientes para asumir la carga asistencial con calidad", en un intento por terminar con la precariedad laboral y dignificar los contratos. En su discurso, Campos lamentó el "tijeretazo" que han sufrido los profesionales de la sanidad allí presentes recordando que desde 2009 se han perdido entre 15 y 21 millones de euros de presupuesto, siendo los más desfavorecidos los centros de Atención Primaria. Por ello citó de "urgente reconducir la situación", señalando que "en algún caso no se necesita dinero", refiriéndose a la gestión de las agendas o la teleconsulta. "Es una cuestión de voluntad, de colaboración y de la implicación de los gestores sanitarios", sentenció recordando el prestigio universal de la sanidad española.

El cambio de la medicina

Aunque la profesión ha cambiado mucho en los últimos años los profesionales defienden que "los principios son los mismos". Si bien admiten que "afortunadamente la tecnología nos ha venido a ayudar muchísimo". "Cuando yo empecé era desconocida la posibilidad de hacer un TAC o una resonancia magnética, no usábamos el microscopio quirúrgico, todo este armamentarium ha dado lugar a que nuestras capacidades terapéuticas, que siguen siendo limitadas, haya tenido un incremento fabuloso," defiende el Doctor Carlos Irisarri. El médico recuerda que aún a día de hoy "hay patologías que todavía son del todo inalcanzables, enfermedades como el cáncer o el alzhéimer? en las que se investiga cuanto se puede, pero estamos muy lejos de encontrar una solución realmente satisfactoria", lamentó.