El PP de Pontevedra comenzó ya a fiscalizar la labor del gobierno local integrado por BNG y PSOE. Y lo hace marcándole objetivos, unos "deberes" con las acciones prioritarias que considera más urgentes y que cree que deben estar encauzadas o en marcha antes de que acabe el año en curso.

La primera medida que solicitan los populares es el impulso del transporte público, para lo que consideran necesario trabajar desde tres perspectivas. Por un lado, apuestan por la creación de un transporte urbano que dé servicio al centro de la ciudad. Consideran que "un vecino de Mollabao tiene derecho a coger un bus que lo lleve hasta A Parda", apuntó el portavoz de los populares Rafa Domínguez. Además, este transporte público debe llegar también a las parroquias para que los vecinos puedan "desplazarse al centro". En tercer lugar, consideran fundamental la adhesión de Pontevedra al Plan de Transporte Metropolitano como "eje vertebrador".

La segunda medida hace referencia a las subvenciones a los clubes deportivos. "Vamos a exigir que se paguen todos los atrasos de la forma más rápida posible", apuntó.

En tercer lugar, Domínguez exige un plan de choque para los barrios. Asegura que el modelo urbano "tiene que seguir extendiéndose a los barrios y no nos valen generalidades, queremos planes concretos". Señaló directamente a Mollabao, Monte Porreiro, A Parda, A Seca y San Roque como lugares que necesitan "actuaciones urgentes".

El PP sostiene la misma postura en lo que se refiere a las parroquias: "Están absolutamente abandonadas". "Estoy ansioso por ver los 100 millones que prometió Lores para el rural porque lo único que hemos visto es que han tenido que pedir 1,5 millones ahora ara las actuaciones", destacó Domínguez. El portavoz del PP considera que "el saneamiento es fundamental y debe llegar al 100%" del rural, pero también resalta que es necesario actuar en materia de "limpieza, desbroce, recogida de basuras, asfaltado, transporte..., no nos llega con que le den a las parroquias lombos y compost, los vecinos necesitan otras cosas".

El concejal Pablo Fernández fue el encargado de exponer las dos últimas medidas que tienen un claro componente "económico y de empleo". La primera es la elaboración del nuevo PXOM: "Esta ciudad se merece un plan que mire hacia el futuro y no 30 años hacia atrás", añadió un plan que nos indique dónde instalar nuestras empresas".

El último de los puntos tiene que ver con la adhesión de Pontevedra al Plan Concello de Emprendedores.Señalan que se trata de una medida urgente que favorecería la creación de empresas. "Vamos con casi dos años de retraso a pesar de que el principal problema de Pontevedra es el paro", indicó Fernández. Para ello es necesario unirse al convenio firmado por la Fegamp y la Xunta de Galicia que implica más simplificación administrativa: bonificaciones en el IBI, IAE e ICIO, más facilidades de acceso a suelo industrial con licencias en 30 días y más incentivos fiscales.