Las acciones de Ence se dispararon ayer en bolsa un 6,26 % al cierre de la sesión hasta protagonizar la mayor subida del IBEX 35, a pesar de lo cual la compañía se ha dejado en el mercado de valores en lo que va de año casi un 30 %.

Al término de la sesión, los títulos de Ence, que logró salvar su salida del Ibex la pasada semana, cerraron en 3,8 euros, desde los 3,6 euros de la víspera.

Según ha apuntado Nicolás López, analista de MG Valores, tras la política del Banco Central Europeo (BCE) y la Reserva Federal de Estados Unidos y los estímulos probables en los próximos meses, se está observando una reacción en algunos de los valores que han sufrido mucho estos meses.

En particular, todos los valores cíclicos como es el caso de Ence, relacionados con las materias primas, que habían caído mucho.

En el caso de Pontevedra, las caídas también estuvieron motivadas por el proceso judicial que podría privarle de la concesión de los terrenos de su fábrica de Pontevedra. Recientemente, unas 2.000 personas exigieron la anulación de la prórroga concedida a la fábrica de Pontevedra, su traslado a otra ubicación y la recuperación ambiental de esta ría gallega.

Ence ya ha advertido de que no trasladará su fábrica de Pontevedra a otra ubicación en Galicia cuando termine su concesión, otorgada por el Gobierno de Mariano Rajoy hasta 2073 y que se encuentra en litigio judicial.

La compañía reiteró en un comunicado que "no existen" en Galicia localizaciones "alternativas" para su actividad y ha defendido además que ese hipotético traslado "no sería viable económicamente" por lo que apostaría por ubicaciones en el exterior.

Ence logró un beneficio neto de 17,3 millones en el primer trimestre del año, un 41,6 % menos que un año antes, por diferencias de cambio y el aumento de los inventarios de celulosa de cara a la parada técnica de su fábrica de Asturas para aumentar su capacidad de producción.