El BNG, PSOE y Avante Poio siguen definiendo un acuerdo que les permita gobernar en el Concello a partir del próximo sábado. En la tercera reunión con los representantes de las tres fuerzas políticas perfilaron un programa conjunto y definieron algunas de las medidas de regeneración del futuro gobierno local. Pese a la buena sintonía, el pacto no está cerrado.
En la reunión de BNG, PSOE y Avante Poio, que estuvo liderado por los candidatos de los tres partidos, Luciano Sobral, Chelo Besada y Sílvia Díaz, respectivamente, se presentaron las medidas con las que buscan acordar un gobierno local más transparente y que resuelva las necesidades de los vecinos más eficientemente y con mayor agilidad. El propio Sobral reconocía que buena parte de estas medidas llegaban a iniciativa de Avante aunque nacionalistas y socialistas coinciden con las necesidades de renovar en el fondo y en la forma del gobierno local.
La propia Díaz apuntaba a la creación de una nueva concejalía llamada Participación Veciñal, Transparencia e Espazos Públicos. "É unha necesidade en non hay ningunha área actual que fomente a participación veciñal, é algo que vai no ADN de Avante", apuntaba la edil. Además se abordó la posible creación de otra área nueva dedicada a la movilidad. En su lugar, se acordó llevar esta cuestión de forma transversal a través de una mesa de trabajo que estará formada por los ediles de Urbanismo, Obras, Servizos Sociais y Seguridade Cidadá.
La intención es que esta forma de trabajo cree un precedente y se amplíe este tipo de gestión a otros campos que pueden ser abordados transversalmente. "Permite unha maior coordinación máis integral e cando falamos de renovación en equipo de goberno, referímonos a que ten que ser un equipo de verdade", explicó Díaz.
En la mesa no se hizo un reparto nominativo de las concejalías. "Teremos que ver cal é a prioridade dos partidos, pero sobre todo o ideal e que cada área a leve unha persoa que se axuste a ese determinado perfil", apuntaba Sobral. El propio alcalde en funciones reconocía que el reparto del gobierno local sería de 3 nacionalistas, 2 socialistas y la concejala de Avante, mientras que se produjeron dos propuestas nuevas para las comisiones. Una posibilidad es que contase con 5 ediles del PP, 3 del BNG, 2 del PSOE y 1 de Avante, mientras que otra sería 4 del PP, 2 del BNG, 2 del PSOE y 1 de Avante, con lo que el tripartito siempre contaría con uno más, aunque será una cuestión que no puede ser impuesta por el gobierno, sino que deberá ser abordada con la oposición y con secretaria del Concello.
Programa conjunto
En la reunión del pasado sábado sirvió a BNG, PSOE y Avante para cerrar las líneas generales de un programa conjunto para los próximos cuatro años que cuenta entre sus prioridades solicitar a la Xunta un nuevo centro médico manteniendo los consultorios de Raxó y Combarro, buscar una ubicación para la Edar de Raxó y Samieira, impulsar el polígono de Fragamoreira, el vial de O Vao, completar el saneamiento o la aprobación del PXOM. Además, acordaron otras actuaciones como completar la senda litoral en el municipio, la humanización de A Barca, Porteliña y Andurique, la seguridad vial en la PO-308 o potenciar las obras de renovación en las zonas singulares con núcleos emblemáticos.
