El hallazgo de una nutria muerta en el embalse de Caldas ha sorprendido a los vecinos. El cuerpo del animal ha aparecido en la carretera que cruza la presa, sobre el asfalto, y con un golpe en la cabeza. Presumiblemente falleció debido al impacto con algún vehículo. A pesar de la colisión, se puede observar que se trata de un ejemplar de gran tamaño y buen aspecto.

La imagen es de lo más inusual, ya que no es habitual ver nutrias en el Umia y menos en el entorno del encoro de A Baxe. Cada verano un alga tóxica tiñe de verde las aguas del embalse y bajan por el cauce del río. Esto lleva a la Xunta a decretar la alarma por la cianobacteria, una alerta que se lanzó en julio del pasado año y no se levantó hasta el pasado febrero. Siete meses con el aviso activado.

Las nutrias son un indicador de la limpieza del agua de los ríos y de la calidad de su ecosistema de ribera. Por ello este triste hallazgo resulta tan sorprendente. Existe constancia de la presencia una familia de nutrias afincadas cauce abajo del balneario de Caldas en el año 2013. Pero desde entonces sus avistamientos han sido escasos y apenas conocidos.