Una de las medidas que se quieren aplicar planes municipales contra incendios, obligatorios por ley en Galicia desde hace doce años, y que incluye la creación de franjas secundarias, las que todos los propietarios de Galicia deberán limpiar antes del próximo día 31. Son franjas de 50 metros en torno a viviendas y cuya limpieza corresponde a propietarios y concellos.

Además, está el control de las quemas controladas, cuyas autorizaciones se limitarán a partir de ahora. En todo caso, este año la comarca ya ha sufrido numerosos incendios forestales, favorecidos por las altas temperaturas en determinados momentos. Ponte Caldelas, Caldas, Poio, Cotobade o Vilaboa ya han sido escenario de estos fuegos, en su mayor parte por el descontrol de quemas de rastrojos.