Ence apela a los gastos de materia prima y personal como razón para amenazar con un hipotético cambio de la producción a otro país. Dice que "al suponer la madera y la mano de obra el 61% del coste total de fabricación de la celulosa, si invirtiese en una nueva fábrica lo haría en un país con estos dos componentes más baratos que en Galicia. Y esta inversión la llevaría a cabo, desde luego, en un país que ofreciese seguridad jurídica a su inversión".
Así lo apunta en este comunicado, donde no especifica qué destino podría tener esa producción, aunque en una carta del consejero delegado, Ignacio Colmenares, a la presidenta de la Diputación, citaba Portugal y Sudamérica.
