Según los datos manejados por el Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo, las cifras de ocupación de esta Semana Santa son muy similares a las del año pasado. La principal diferencia radica en que en 2018 la mayoría de las reservas se hicieron con cierta antelación, mientras que este año se ha experimentado un importante repunte en los dos últimos días, al producirse una mejora de las condiciones meteorológicas, que se esperaba que fueran adversas.

En cuanto a Pontevedra, las estimaciones realizadas por los propios hoteleros y por Turismo Rías Baixas hablaban de un 65 por ciento de ocupación, una cifra que ha mejorado ligeramente con el aumento de las temperaturas, aunque en la capital no se ha notado tanto este repunte al no ser un destino propiamente de playa.