Proteger a la flora y la fauna y el medio ambiente natural es la razón de ser de los agentes del Seprona de la Guardia Civil, aún cuando aquellos a quienes protegen a veces no tengan el comportamiento que los humanos consideramos más adecuado. Es lo que ocurrió con un zorro que buscando comida no se le ocurrió mejor alternativa que acudir a un gallinero de Portas.

El pequeño "raposo" se dio un gran banquete, según explica la Guardia Civil de Pontevedra a través de las redes sociales, pero quedó atrapado en el interior del gallinero y fue liberado por los agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza. Estos lo atraparon y lo liberaron en su hábitat natural, aunque según se puede ver en el vídeo que compartió la Guardia Civil de Pontevedra a través de Twitter, parece que al animal le costó despedirse de los agentes de la patrulla del Seprona de Vilagarcía que lo liberó. Tanto que incluso parece que tuvieron que invitarlo a que regresara al monte.