La empresa DomusVi concluyó hace cuatro meses, a principios de diciembre, el derribo del antiguo cuartel de la Guardia Civil en la calle Loureiro Crespo, y desde entonces aguarda por la licencia municipal para levantar la futura residencia de la tercera edad en ese solar. Ese trámite está prácticamente listo y solo debe superar un último y llamativo obstáculo: una autorización de la Agencia de Seguridad Aérea sobre servidumbre aeronáutica, según explica el departamento de Urbanismo del Concello.
La concejala del área, Anabel Gulías, explicó ayer que el estudio de detalle del futuro geriátrico ya está aprobado sin alegaciones y la concesión de la licencia ya está lista a la espera de ese permiso aeronáutico que acredite que el inmueble no supone riesgo para la navegación aérea. Es un trámite que han tenido que cumplir otros proyectos en la ciudad.
DomusVi ya ha contratado a la empresa que asumirá las obras en su solar que adquirió en su día al Estado por 1,4 millones. Tiene previsto destinar otros 7.800.000 euros en la futura residencia para personas mayores, que ofrecerá 118 plazas privadas con servicios especializados y "con los altos estándares de calidad habituales en sus inmuebles de nueva construcción".
Expansión
Con esta nueva residencia, DomusVi continúa su plan de expansión por toda España y suma un nuevo centro a su red. La residencia tendrá seis plantas dedicadas enteramente a la atención de las necesidades de las personas mayores. De este modo, las primeras se destinarán a las zonas de recepción, administración y terapias, gimnasio, sala de convivencia, comedor, cafetería y jardín; y entre la tercera planta y la sexta, se distribuirán las 46 habitaciones individuales y 36 dobles de las que dispondrá el centro. En la edificación destaca la terraza superior donde se habilitará un huerto urbano para disfrute de los mayores más vinculados al cultivo de la tierra. Además, tendrá una plantilla profesional multidisciplinar de unas 65 personas. DomusVi ofrece seis centros más en la provincia poniendo a disposición de la población pontevedresa 874 plazas residenciales y 170 de centro de día. Con este nuevo centro, la compañía afianza su posición de liderazgo en Galicia donde gestiona 31 residencias y ofrece cerca de las 4.200 plazas.
Hace cuatro meses finalizó la demolición del antiguo cuartel, iniciado en octubre, un viejo edificio de los años cuarenta del siglo XX que llevaba abandonado desde 2006 y que se convirtió en un foco de insalubridad y albergue de "okupas", por lo que su derribo fue recibido con satisfacción por todos los vecinos.
Desde entonces aguarda por el permiso para edificar. El solar está totalmente despejado salvo las paredes exteriores de piedra de la planta baja, que se incorporarán a la nueva residencia geriátrica. Según el estudio de detalle, la parcela, situada junto a la iglesia parroquial de Virgen del Camino, ronda los 1.900 metros cuadrados y algo más de 500 metros se reservan para "espacios libres".
