El cierre de las piscinas de Campolongo, una instalación que además de los espacios vinculados a los deportes acuáticos contaba con salas de fitness, spa y actividades dirigidas, ha llevado a cientos de capitalinos a buscar nuevo gimnasio. Se cumple una semana del arranque de las obras (de hecho ya ha avanzado el proceso de demolición) y en paralelo se ha incrementado la demanda en clubes deportivos del centro de la ciudad.

Es el caso de Supera24 Fitness Pontevedra, cuyos usuarios constatan el sensible incremento en las últimas jornadas de alumnos en las clases dirigidas y de usuarios en la sala de máquinas, un aumento de la afluencia especialmente visible en las horas punta.

Un efecto semejante se produce en el gimnasio Budo, que además de fitness, yoga, pilates o entrenamiento personal ofrece a los socios la posibilidad de practicar deportes acuáticos. "Sí hemos notado ese incremento de la demanda", constatan desde la instalación dedicada al cuidado físico,. "Se interesan sobre todo por la piscina, pero también por las clases dirigidas, en general un poco de todo".

Esta demanda de instalaciones deportivas se mantendrá al menos durante el próximo medio año, hasta la reapertura de las piscinas de Campolongo. Será un complejo deportivo completamente nuevo y pasará de los 3.800 metros de superficie con los que contaba a 5.700, ganando nuevas salas (de 4 a 9) para propuestas vinculadas al entrenamiento y el ejercicio físico. Destaca el espacio para actividades de suelo, que aumentará de 700 a 1.600 metros de superficie.

Una planta más

El edificio ganará una planta sobre su actual emplazamiento, si bien se mantendrán las pistas exteriores, y el club incorporará nuevos servicios o mejorará otros que ya ofertaba. Es el caso del de fisioterapia, que pasará a contar con una sección dedicada a la nutrición.

Según los datos hechos públicos por Serviocio, la empresa concesionaria del centro deportivo, buena parte de los socios ha reservado plaza para estrenar en otoño las nuevas instalaciones.

Tras una inversión de 4,7 millones de euros, la previsión de Serviocio es que las obras concluyan a finales de septiembre y reabrir el 1 de octubre. En adelante, se propone multiplicar el número de abonos a las instalaciones y consolidarse en la franja de los 3.000 socios en los siguientes meses.