El objetivo de esta primera fase de obras, que se completará con la adecuación posterior del entorno por 3,6 millones, es "dar orden y limpieza" al interior de la terminal, "buscando un espacio más tranquilo, agradable y cálido, claro y funcional, que se entienda fácilmente y que procure que la circulación sea intuitiva y agradable", según se detalla en el proyecto firmado por el arquitecto coruñés Manual Vázquez Muiño.

Para esa zona interior se propone "una nueva rampa que cumpla accesibilidad, con un recorrido totalmente lineal, evitando el giro a 90 grados que existe actualmente", además de que "tanto la cafetería como el comedor estén claramente abiertos al vestíbulo, mediante paramentos de vidrio, lo que permite una relación visual entre estas zonas y que da un poco más de vidilla a ese espacio".

En el vestíbulo principal se mantienen parte de los locales que están pegados a la fachada sur. Sin embargo, se eliminan los que unen el vestíbulo principal con el vestíbulo central (donde se ubica el núcleo de comunicaciones que conecta con los andenes), "para clarificar las circulaciones y dar una sensación de mayor de continuidad".

Para de los muros interiores se forrarán con láminas de madera de castaño o con un paramento de tablas de abeto, y también está previsto el uso de vidrio. Explica que "una banderola superior, colocada de manera continua coincidiendo con esa fachada de vidrio, permite que los locales se visualicen claramente, dando un mayor atractivo".

El diseño explica que "el servicio provincial de transporte se mantiene en su ubicación actual, y en él no se realiza ninguna intervención interior, quedando como espacio disponible para futuros usos".

Por su parte, en la zona de andenes "se dispone de un nuevo vestíbulo, más amplio y luminoso, y desde el que se tiene visión directa sobre el exterior, y en el que poder esperar en un espacio más protegido. Este espacio está justo en la zona de desembarco del núcleo de comunicaciones, lo que mejora sustancialmente la forma que hay ahora mismo de llegar a planta baja, que se hacía sobre un espacio pequeño, dando directamente a las puertas de los baños".

Este nuevo vestíbulo dispone además de una zona de aseos a modo de mueble exento, mientras que la zona ocupada por la compañía de bus Monbus actualmente se deja en su misma ubicación, y no se interviene en su interior.