La concejala de Festexos e Cultura, Lidia Salgueiro, hizo ayer balance de las fiesta del Entroido celebrada hasta el momento, caracterizada por las novedades como el cambio en los formatos en Combarro y Lourido con los entierros del Mexilón y Berberecho, así como el traslado de la incineración del Galo Fodorico de Arís a la plaza del Monasterio o el cambio del recorrido del desfile para pasar por la PO-308.

"Las celebraciones en las plazas tuvieron muy buena acogida y por el mal tiempo desplazamos el desfile haciéndola coincidir con el entierro del Galo Fodorico, pero fue muy positivo con el cambio de recorrido", indicó señalando que se había logrado ampliar la afluencia de público y de participación, así como mejorar en la comodidad de los grupos del concurso, los objetivos que se habían marcado. "Hay cosas que pulir y nos sentaremos todos los que lo organizamos para mejorar algunas cosas", indicó.

La edil también reconoció problemas en cuanto al operativo de tráfico en el día del desfile. "Parte el vallado puesto -por la Policía Local- para evitar aparcar en algún tramo del recorrido desapareció durante la noche, especialmente en torno al Juzgado y la gente aparcó en esa zona, pero fue solventada en la salida de servicios y del parking del supermercado de la zona", indicó.