El proyecto de 2,6 millones, para una primera fase, con el que la Xunta pretende rehabilitar por completo la vieja estación de autobuses, tiene como premisas básicas ordenar interiormente un edificio que el propio documento califica de "deslavazado", y dotar de mayor luz natural a un inmueble que supera las tres décadas y que apenas ha recibido mejoras en estos años.

El proyecto explica que la terminal ocupa una parcela de 17.636 metros cuadrados, aunque la superficie construida apenas supera los 5.000. Subraya que "el edificio presenta actualmente, tanto en el interior como en el exterior, un aspecto un poco deslavazado, con diversos acabados, recovecos e instalaciones vistas". Para ello, la rehabilitación plantea varios objetivos.

Plano de la actuación prevista en el entorno, con el río de Os Gafos destapado. // FdV

En el exterior son: "Reordenación de los locales comerciales y eliminación de los inutilizados; eliminación de la división zonas de espera en primera planta; ampliación del vestíbulo de planta baja; dotación de mobiliario y luminarias; renovación de carpinterías; mejora de la acústica y la iluminación en las zonas de espera; y acondicionamiento y adaptación de la accesibilidad de los aseos".

Las actuaciones exteriores previstas son: "Mejora estética de la fachada; renovación de la cubierta del edificio y de su evacuación de pluviales; reparación de humedades y desperfectos en los elementos constructivos del edificio; acondicionamiento térmico del edificio; adaptación a la normativa vigente de la señalización y los paneles informativos; y cierre perimetral de la estación".

También se recuperará "la cubierta del proyecto original, eliminando la cubierta de chapa que se ha realizado en reformas posteriores y está previsto un acabado "con grava blanca, obteniendo una imagen limpia y agradable". Asimismo se quieren "recuperar los lucernarios del proyecto original, que dan cierto juego a la cubierta, entendida como una quinta fachada, lo que además permitirá dotar de luz natural al interior del edificio".

Una "segunda piel" para la terminal

Se propone una "segunda piel" para el edificio hacia las dársenas "a base de chapa acero microperforada, que dé una imagen unitaria al inmueble, tapando las instalaciones vistas y todos los recovecos y salientes de la fachada actual" como se ve en la imagen sobre estas líneas. Esta "segunda piel", además de dotar a la terminal "de un volumen más limpio, permite generar una protección" frente al sol.