Una de las principales calles comerciales de la ciudad, Benito Corbal, volverá a cambiar de sentido para el tráfico rodado a partir del miércoles, cuando se retoman las obras de reforma del segundo tramo de esta calle, desde el edificio de la Xunta, hasta la plaza del Hospital. Cabe recordar que ya está finalizada la primera fase del proyecto (desde Sagasta hasta Blanco Porto) y tan solo queda pendiente el asfaltado, que se realizará de forma conjunta para toda la calle.

Las obras, que se detuvieron unas semanas con motivo de los actos del Entroido, continuarán en este segundo tramo por la acera situada al lado del edificio de la Xunta, que sigue en obras. Es por ello que la actuación en este punto en concreto, el del edificio de la administración autonómica, se deja para el final a la espera de la retirada de los andamios y las vallas de obra. Si finalmente las obras en el edificio de la Xunta no finalizaron a tiempo, se pervé dejar este punto sin finalizar para comenzar con la reforma de Lepanto que irá avanzando desde el entronque de la rúa San Antoniño hacia el edificio de Benito Corbal, procediendo a rematar este punto al final de todo.

Al igual que ocurrió en el primer tramo, esta nueva fase de la obra supondrá nuevas restricciones al tráfico, para tratar de acelerar el proyecto lo máximo posible. Según explican desde el Concello, la calle Lepanto ya se podrá abrir al tráfico normal y volverán a cambiar de dirección las calles que en la primera fase cambiaron de sentido.

Así, se reabre el trecho de Benito Corbal entre Blanco Porto y Vasco da Gama (que es la bajada hacia la plaza de Barcelos). Se cierra la circulación entre Blanco Porto y Cobián Areal y, para poner en marcha este corte, se cambiará el sentido de circulación de Joaquín Costa entre Blanco Porto y Uxío Novoneira, que pasará a ser de entrada a la ciudad.

Por último, se invierte el sentido de la calle Blanco Porto en su totalidad, quedando de entrada hacia Benito Corbal y Cruz Gallástegui.

En todo caso, desde el Concello explican que estará autorizada la carga y descarga y también el acceso a residentes que accederán al tramo ahora cerrado entre Benito Corbal y Cobián Areal o bien entre Benito Corbal y Blanco Porto.

Según explican desde el ayuntamiento, la reforma de Benito Corbal “pretende profundizar no modelo” de ciudad de Pontevedra especialmente en una zona de gran importancia comercial. “Quere mellorar a calidad de vida e mobilidade tanto peonil como de vehículos privados”.El gobierno local destaca que es un ámbito con un tráfico peatonal muy intenso, por lo que es necesario ampliar espacios para los peatones. De esta forma, se reducirá el espacio del vehículo privado que quedará confinado a un carril en toda la vía y el resto se ganará para peatones. Los tres metros actuales de acera (que no se demolerán, sino que se amplían) pasarán a ser cuatro con el nuevo modelo y el estacionamiento quedará limitado al margen derecho (sentido de circulación) que será de servicios y de carga y descarga.

La seguridad vial se incrementará con la reducción del carril y pasos elevados de peatones, concretamente, el cruce de Blanco Porto y Benito Corbal será un paso elevado en su totalidad. Para garantizar el paso de cabalgatas y desfiles se cortan las acacias del margen izquierdo de la calle.