Quince meses de prisión y cuatro años de retirada de carné. Esta es la pena que aceptó ayer un pontevedrés, A. C. F., como autor de un delito contra la seguridad vial por conducir de forma temeraria por Salcedo.

A. C.F. fue juzgado ayer. Llegó a la sede judicial de A Parda procedente de prisión, no en vano cuenta con múltiples antecedentes policiales y judiciales a sus espaldas.

Reconoció que el 16 de agosto de 2015, apenas tres meses después de haber cumplido una pena anterior por conducción temeraria, fue localizado en la N-550 al volante de un coche robado. Su conducción "irregular" llamó la atención de una patrulla de la Guardia Civil que se acercó al vehículo. En ese momento, el acusado apagó las luces y arrancó a toda velocidad hacia el lugar de Lusquiños, en Salcedo. Se inició ahí una persecución en el que el acusado circuló entre las casas "a gran velocidad", llegando a colisionar contra varios muros y estando incluso a punto de arrollar a varios peatones.

En su huida, el acusado tampoco respetó señales de STOP y ceda el paso en una conducta que supuso "un peligro para la circulación viaria", al y como se recoge en el escrito de la Fiscalía de Pontevedra.

Iba con una chica

Finalmente acabó su fuga en una finca particular en la que abandonó el vehículo, siendo posteriormente localizado por la Guardia Civil. En el interior del vehículo también viajaba, además, una chica a la que también puso en peligro por la conducción temeraria que realizó.