El portavoz del PP de Poio, Ángel Moldes, remitió ayer por carta a la Valedora do Pobo interponiendo una queja formar contra el alcalde de Poio, Luciano Sobral, por impedir el acceso al Pazo de Besada. El popular denuncia que desde principios de año el gobierno local no responde a las solicitudes de autorización para acceder al inmueble.

En el escrito, Moldes hace un repaso sobre la historia y la situación de la finca de Besada y el edificio principal, el pazo construido en 1913, que es de titularidad municipal desde hace casi una década y que se mantiene cerrado "en estado de abandono y sin actividad conocida desde su adquisición, pese al compromiso de acondicionarlo para ponerlo a disposición de la vecinanza", indicó el portavoz del PP poiense. El pazo forma parte de una finca de casi 10.000 metros cuadrados, con distintos edificios y una importante riqueza natural, también de titularidad municipal y que igualmente el PP denuncia "un estado de infrautilización y abandono".

El popular recuerda que en mayo en mayo del 2017 el grupo municipal visitó el pazo para examinar y "dar a conocer la situación de abandono del edificio". Los populares volvieron a solicitar autorización para acceder a al pazo los pasados días 4 de enero y el 18 de febrero, sin que hubiera respuesta por parte del gobierno local, así como en el pasado martes en el pleno municipal.

Moldes considera que el gobierno local estaría vulnerando el derecho a la participación política, que se contempla en el artículo 23 de la Constitución. Con su queja formal ante la Valedora do Pobo, el PP busca que esta institución inste al alcalde a que "garantice de forma inmediata el acceso al Pazo de Besada, para que todos puedan saber que tiene tanto interés en ocultar".