Un grupo organizado de furtivos que reiteradamente venía asolando los arenales de combarro fue detenido por la policia autonómica. Guardas rurales de la cofradía de San Telmo de Pontevedra y agentes de la Policía autonómica, en un dispositivo de lucha contra el furtivismo, vieron a unas cuatro personas sustrayendo almeja en el arenal. Al ver lo que sucedía, los guardas optaron por esperar y, durante más de media hora, se dedicaron a observar la actuación de los furtivos. La estrategia dio buenos resultados porque consiguieron seguir a los furtivos hasta un vehículo Audi A3 que los recogió y se dio a la fuga, siendo interceptado por una patrulla de la Policía, que incautó el bivalvo del interior del vehículo que ilícitamente habían sacado del mar, así como material técnico utilizado para sustraer el marisco.

Una vez en la Comisaría de Policía de Pontevedra, la báscula mostraba en presencia de las cinco personas detenidas (cuatro furtivos más la conductora del vehículo) que habían sido sustraídos 101,18 kilos de almeja japónica, por lo que se les imputa un delito de furtivismo y grupo organizado, tal y como recoge el artículo 335.2 del código penal.

Los detenidos, tras prestar declaración, fueron puestos en libertad siendo incautado el vehículo así como el material técnico que portaban en su interior. La almeja sustraída fue calibrada por clases en las instalaciones de la Cofradia de San Telmo, dando como resultado que 48,56 kg corresponden a tamaño antirreglamentario, lo que perjudica gravenente la sostenibillidad del recurso marisquero. La almeja intervenida fue devuelta a los arenales de Combarro por los guardas rurales.