El último informe del Instituto Nacional de Estadística sobre ocupación hotelera en el primer mes de 2019 confirma la tendencia de crecimiento constante en el sector turístico que tiene una traducción clara sobre las tarifas que aplican los hosteleros locales.

Francisco González, presidente del Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo, confirma que el pasado año ha sido decisivo para el sector en lo que a política de precios se refiere. Sobre todo en temporada alta, los hosteleros de Sanxenxo sitúan por encima del 4% el incremento en la tarifa aplicada a la plazas hoteleras, un dato que puede extrapolarse al resto de la comunidad.

"Sanxenxo es el primer destino turístico de Galicia, solamente equiparable a Santiago de Compostela por el tirón del Xacobeo", así argumenta Francisco González que la política de precios aplicada en Sanxenxo repercute en todo el sector gallego.

Sin embargo, la recuperación en las tarifas no es equiparable a la rentabilidad que la ocupación genera en las empresas, que tras la crisis iniciada en 2007 registró una drástica reducción en sus tarifas para mantener la competitividad en un mercado muy reñido.

En este sentido Francisco González explica que "queda mucho trabajo por hacer" hasta conseguir la rentabilidad anterior a los años de crisis. Una mejor comercialización y la modernización de los establecimientos hoteleros son dos de las claves que el presidente del CETS considera "imprescindibles" para el sector empresarial.

"De nada sirve que hayamos podido subir los precios si la administración ha derivado sobre nosotros muchas más obligaciones de las que teníamos antes". Francisco González considera que la administración aprovechó la crisis para imputar al sector la creación de numerosos puestos de trabajo indirectos. "Lo explico con un ejemplo. A un hotel no solo le obligan a instalar un ascensor, también a contratar a una empresa que se encargue de su mantenimiento periódico y a otra que certifique que ese mantenimiento es correcto. Esto es una constante, porque la administración ha actuado con rigor en este sector convirtiéndonos en uno de los más garantistas del mercado, de ahí que podamos decir que es difícil encontrar en el mercado internacional otro destino que en calidad y servicio nos pueda superar", apunta.

La rentabilidad es por tanto el caballo de batalla del sector hotelero, que tiene como objetivo acercarse a los precios de destinos como Canarias o Levante. "Estamos todavía muy lejos de aplicar tarifas similares a destinos que no ofrecen mejor servicio que nosotros y que como marca tampoco nos superan", concluye Francisco González.

El incremento de tarifas no se circunscribe exclusivamente a la temporada alta. Durante los fines de semana de invierno Sanxenxo y Pontevedra cuentan con un sector saneado y dinámico en el que el mercado interno es fundamental.

"Nos cuesta mucho tener una ocupación media rentable para mantener el alojamiento abierto de domingo a jueves en invierno", asegura González para justificar la decisión de buena parte de los hoteleros de cerrar sus puertas de noviembre a marzo. Sin embargo apunta que de jueves a domingo la ocupación es cada vez mayor. "Cada vez viene más gente y eso es el resultado de un buen trabajo. Estamos en un sector en el que todavía queda mucho por hacer, pero en el que también hemos avanzado mucho".

Recuerda que en año 1995 en la comarca la temporada fuerte se ceñía al verano. "Ahora me preguntan por previsión de ocupación en carnaval, en puentes , en Navidad; eso es lo que hemos avanzado".