Carme da Silva descartó ayer la instalación de pantallas en el exterior del Pazo o en el Teatro Principal para seguir el Concurso de Murgas, ya que el aforo de las instalaciones es muy inferior a la demanda de público que quiere asistir a este evento.

Da Silva aseguró que esta opción ya fue estudiada en anteriores ediciones y descartada por una cuestión de inviabilidad económica. Insistió además en que el público quiere vivir el evento desde el interior del Pazo y que cualquier otra fórmula "non funcionaría".