El puente da Barca queda desde hoy lunes con carril único. El retraso de las obras de rehabilitación del viaducto llevan a la Consellería de Infraestruturas a cortar desde las 9.30 horas el tráfico de entrada a la ciudad y solo será posible circular desde Pontevedra hacia Poio.
La medida se alargará hasta que concluyan los trabajos, aproximadamente un mes, y en principio solo se aplicará de día, hasta las ocho de la tarde.
Mientras el Concello de Pontevedra no pone objeciones al cierre, la Policía Local de Poio alerta de los perjuicios de la medida, cuya aplicación ve "inviable" al "no existir un plan de tráfico, ni de señalización, ni están avisados las empresas de transporte escolar ni los colectivos afectados".
El jefe de esta plantilla expresó ayer su preocupación porque este cierre parcial, que impide pasar de Poio a Pontevedra por A Barca, será "un colapso para los vecinos de Poio, ya que la única alternativa sería la salida por la avenida de Domingo Fontán (rotonda de Bomberos) donde no hay prioridad de paso en la salida, zona ya de competencia de Guardia Civil, desconociendo si este cuerpo tiene constancia de tal corte proyectado por la Xunta".
Este corte se produce más de cinco meses después del inicio de las obras, en agosto pasado, y con el plazo de ejecución ya cumplido. La Xunta justifica esta demora en la "adversa climatología" y en la "negativa del Concello de Pontevedra a trabajar de noche".
La consellería ha determinado que el puente das Correntes será la principal alternativa de acceso al casco urbano, si bien es posible hacerlo por ortos puentes. En todo caso, la Policía Local de Pontevedra no ha establecido ningún dispositivo especial de tráfico para este próximo mes.
En medio de la polémica por las autorizaciones nocturnas o no del Concello de Pontevedra y las quejas que ahora lanza la Policía Local de Poio, la Consellería de Infraestruturas no ha modificado las previsiones que anunció el pasado miércoles su titular, Ethel Vázquez.
Fuentes oficiales de la consellería confirmaron que el cierre se mantiene para hoy "entre las 9.30 horas de la mañana, al pasar la hora punta de tráfico, y las 20.00 horas, aproximadamente. El sentido del tráfico será siempre de salida (desde Pontevedra), aunque se esté trabajando alternativamente en los dos carriles".
En este plazo de un mes se pretende concluir la instalación de la nueva marquesina, estéticamente similar a la anterior, y el montaje de la iluminación y otros remates.
Infraestruturas explica que el trabajo actual en el puente "está centradas en la renovación de la marquesina" y la intención era mantener los trabajos nocturnos para no afectar al tráfico. Sin embargo, argumenta que Pontevedra no autoriza esas labores de noche por el ruido que generan las obras. De hecho, la Policía Local las paralizó en algunas ocasiones tras recibir quejas vecinales, por carecer de ese permiso municipal.
La administración autonómica destina 1,2 millones a la restauración del puente da Barca, que se puso en marcha una vez que se detectó que el viaducto necesitaba reparaciones urgentes, sobre todo, después de quedar bastante maltrecha la vieja marquesina como consecuencia, precisamente, de los temporales del pasado invierno.
El montaje de la marquesina requiere de maquinaria que obliga a ocupar parte de la calzada. La administración autonómica destina 1,2 millones a la restauración del puente da Barca, que se puso en marcha una vez que se detectó que el viaducto necesitaba reparaciones urgentes, sobre todo, después de quedar bastante maltrecha la vieja marquesina como consecuencia, precisamente, de los temporales del pasado invierno.
