El Observatorio Urbano de Pontevedra 2017 vuelve a dejar claro el peso específico que tiene la Brigada Galicia VII para Pontevedra, concretamente su base General Morillo ubicada en Figueirido. Según este estudio, el impacto económico directo que tiene la instalación militar en la comarca fue de 43,4 millones de euros, lo que supone casi un 1% más que en el ejercicio anterior. El estudio se trata de impacto directo, es decir, desembolso que realizó el Ministerio de Defensa en la comarca con el pago de salario y otros gastos derivados del funcionamiento de la base.
De estos 43,4 millones de euros, la mayor aportación se destinó al pago de salarios. En total 38,4 millones de euros para pagar los sueldos del personal en el que es el mayor centro de trabajo de la comarca con unos 2.200 empleados que cada día desarrollan su actividad laboral en estas instalaciones (o allí donde sean requeridos). A esta cantidad hay que sumar 1,9 millones como indemnizaciones extraordinarias por razones de servicio, que se suelen corresponder con la participación de sus efectivos en labores de instrucción o adiestramiento de carácter especial.
El resto, otros 3,1 millones, se destinaron a afrontar los gastos para el funcionamiento de la base y para pagar a proveedores. Por ejemplo, solo a alimentación se destinaron 856.000 euros, o también es destacable el consumo de un millón de euros en combustible. A estas cifras hay que sumar casi medio millón de euros en mantenimiento de las instalaciones, 266.000 en gasto de material, 192.000 en limpieza, o 100.000 en obras, según los datos facilitados al Observatorio Urbano por la propia Brilat en julio del pasado año.
Según este informe, el papel de la Brigada Galicia como dinamizador económico local y comarcal también queda de manifiesto en tanto en cuanto muchos de sus empleados son pontevedreses o residen en la ciudad del Lérez. De los 2.200 trabajadores de la base General Morillo (entre militares, civiles de la administración militar y civiles empleados por empresas contratistas) un 41% son pontevedreses y un 71% son gallegos. Además, el 84% son empleados menores de 42 años, por lo que es un nicho de empleo juvenil. Un 42% tienen menos de 30 años.
Cuentan, además, con 374 proveedores totales, de los cuales 133 son empresas de abastecimientos o servicios instaladas en la comarca de Pontevedra.
Además, hay varias empresas que prestan sus servicios en la base sin coste para la administración y que en total suman 47 empleos civiles a mayores. Son firmas de cafetería, bazar, peluquería, óptica, ortopedia y de fisioterapia.
Nueve millones por misión
A estas cifras hay que sumar retribuciones extraordinarias en caso de que los efectivos de la Brilat se sumen a misiones de paz en el exterior, como es el caso actualmente de los dos contingentes desplegados en Líbano y en Mali. En este sentido, cabe destacar que, según los cálculos de este estudio, un contingente medio de 500 militares por seis meses de estancia en una zona de operaciones internacionales puede suponer un desembolso de 9,3 millones de euros a mayores solo en retribuciones extraordinarias. Cabe recordar que la Brilat acumula 19 misiones de paz entre el año 1995 y 2014.
A todo este impacto económico, el informe suma la "proyección de la imagen internacional" de Pontevedra a través de la Brigada Galicia. Además de las misiones internacionales resalta, por ejemplo, que entre 2015 y 2017 instauró y lideró la primera Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad de la OTAN, así como su intervención en verano en la Operación Centinela Gallego contra los incendios, así como su arraigo social en la comarca y su participación en múltiples actividades de carácter social, deportivo, cultural y educativo.
