Sin citar ningún caso concreto, la Asociación de Constructores de Pontevedra aboga por adaptar todos los planes de urbanismo de la provincia a la normativa sectorial como fórmula para recuperar la actividad. Así lo apuntó ayer el gerente del colectivo, Javier Carballeda, tras mantener una reunión con el alcalde, Miguel Fernández Lores, y la concejala de Urbanismo, Anabel Gulías.

La edil destacó que en los últimos tiempos se detecta un repunte de la construcción en el municipio, con un total de 493 viviendas con licencia en marcha o concedidas, si bien admitió que no todas se ejecutan.

Este relanzamiento del sector también es reconocido por Carballeda, hasta el punto de que alerta de una falta de trabajadores en la construcción para hacer frente a la actividad actual. Explica que durante la feroz crisis que afectó a esta actividad muchos trabajadores se jubilaron, emigraron o se desplazaron a otros sectores y ahora se hecha en falta mano de obra.

Pero también cree que las administraciones deben implicarse y elaborar planes de urbanismo donde no los haya o adaptarlos a la normativa vigente en su caso, como ocurre en Pontevedra, cuyo documento cumple ahora veinte años (entró en vigor en enero de 1989) y su renovación está paralizada desde hace tiempo.

La escasez de mano de obra fue uno de los asuntos analizados en la reunión de ayer con el fin de que el Concello participa en programas de formación.

La Asociación de Constructores de Pontevedra se puso en marcha hace apenas año y medio, al recuperar una agrupación anterior que desapareció con la crisis y a día de hoy, según Carballeda, agrupa a una treintena de empresas de la provincia. También forma parte de una fundación, un organismo paritario entre la patronal y los sindicatos UGT y CC OO.

Carballeda admite que la crisis afectó de forma absoluta al sector y no volverán los tiempos de la burbuja inmobiliaria, pero también subraya que la construcción supone cerca del 10% de los puestos de trabajo de la provincia y alrededor del 8% de su PIB.