Los usuarios de la carretera PO-308 entre Sanxenxo y Poio vivieron ayer momentos de pánico al encontrarse con un coche que circulaba haciendo "eses" por el vial e invadiendo los dos carriles de circulación. Al volante iba una mujer, vecina de Santiago de 42 años, que cuadruplicaba la tasa de alcoholemia, según comprobaron más tarde los agentes de la Policía Local de Poio, después de que la conductora se saliera de la vía en la recta do Laño. En principio no sufría lesiones.

La presencia de este coche en la carretera provocó una avalancha de llamadas a la Policía Local y al 112, toda vez que la mujer circuló en este estado varios kilómetros, desde Sanxenxo hasta Poio, donde se accidentó.

Los primeros avisos se efectuaron alrededor de las 15.30 horas a la Policía Local de Sanxenxo, ya que era en ese término municipal donde se vio por vez primera al vehículo dando bandazos por la carretera. Sus agentes trataron de localizar el coche pero no lo encontraron en el tramo de la PO-308 de Sanxenxo, ya que para entonces se había adentrado en Poio.

La Policía Local de este segundo municipio también recibió numerosas llamadas de conductores alarmados por la errante trayectoria de la citada conductora. Finalmente localizaron el vehículo en la parroquia de Samieira, poco antes de las cuatro de la tarde, después de salirse de la vía por la derecha. Supuestamente el accidente ocurrió a causa del exceso de alcohol de la santiaguesa. Fuentes de la plantilla poiense indicaron que arrojó un resultado de 1.01 ml/g, cuatro veces por encima del límite legal de 0,25.

La Guardia Civil de Tráfico, a la que corresponde el tramo donde se produjo el accidente, se hizo cargo del atestado y previsiblemente se le impute a la conductora un delito contra la seguridad vial. El marido de la conductora se hizo cargo del vehículo.