El sector de la industria ha cogido peso en el municipio de Pontevedra, así como en su comarca. Es, de hecho, el único que ha incrementado su aportación al Producto Interior Bruto, PIB, local respecto al año 2010, con un 13,5 por ciento más.
El PIB de la ciudad capitalina es de algo menos de 1.889 millones de euros, una media de 23.374 euros por habitante, según los datos recientemente publicados por el Instituto Galego de Estatística (IGE), referidos a 2016.
Esta información segura que desde el año 2010 el mayor crecimiento se ha dado en la industria, que ha pasado de tener un peso sobre el PIB de un 9,3 por ciento a un 10,6. En términos absolutos son 23 millones de euros más: de 176 a 199, es decir, el citado 13,5 por ciento.
No siempre ha sido así, ya que entre 2010 y 2014 la caída de la aportación de este tipo de empresas fue continua en su conjunto, llegando a ser cercana a un -30 por ciento y a suponer tan solo un 7 por ciento del total del PIB.
La subida más importante llegaría en 2014. En solo dos años, la industria sufría un interesante impulso para la economía local con un incremento de más de un 61,6 por ciento al situarse en los 199 millones de euros del año 2016 frente a los 123 anteriores.
Burbuja inmobiliaria
Al resto de sectores no les ha ido tan bien en la ciudad. El más perjudicado a nivel económico es el de la construcción por la crisis. Aunque comienza a experimentar una subida con mayor actividad, todavía no está reflejada en los datos aportados por el IGE.
Desde 2010 hasta 2016 se ha reducido su aportación monetaria al PIB un 18 por ciento, puesto que pasó de facturar más de 165 millones de euros a 135. Sin embargo, el peor período de tiempo fue el comprendido entre los años 2012 y 2014, con 35 millones de euros menos, un -20,3 por ciento.
La construcción ha perdido el segundo puesto en montante al Producto Interior Bruto local, ya que aporta poco más de 7 de cada 100 euros. En este sentido, ha sido desbancada por la industria, que se acerca a los 11 y que ha subido un puesto.
El primer lugar continúa siendo para los servicios, que pese a una mínima bajada, se mantienen en 1.371 millones de euros, es decir, cerca de un 73 por ciento del peso del PIB. Son, eso sí, tres puntos menos que en el 2014, cuando suponía más de un 75 por ciento.
Por último, el sector primario sigue siendo residual en Pontevedra, solo un 0,2 por ciento del PIB y 4 millones de euros, que ya llegaron a ser 5.
El ladrillo en Marín
El IGE solo aporta información sobre los concellos de más de 20.000 habitantes en cuanto a sectores productivos. El otro ayuntamiento incluido en los datos del instituto oficial es Marín, que tiene un PIB de más de 420 millones de euros, con una media de 17.274 euros por habitante.
La tendencia es muy diferente al de Pontevedra, ya que, el único sector que sube es el de la construcción. Son 9 millones de euros más que en el año 2010, es decir un 50,5 por ciento más. La aportación de este sector al PIB local es de más de 6 euros por cada 100.
Muy contrariamente a lo que ocurre en el municipio capitalino, en el marinense es la industria la que sale peor parada. Desde 2010 ha facturado un 37,5 por ciento menos, 30 millones de euros a la baja. Además, su presencia en el PIB ha pasado de ser casi un 19 por ciento a poco más de un 12. El mayor descenso en este sentido se produjo entre los años 2010 y 2012, con cuatro puntos de diferencia y más de 20 millones de euros menos.
En cuanto al sector primario, también ha caído de forma importante, más de un 19 por ciento, 35 millones de euros a 28. Ahora aporta menos de 7 de cada 100 euros del PBI local.
Por último, los servicios también suben, aunque algo menos de un 5 por ciento al pasar de 256 millones de euros a 268. Es el sector con mayor peso en el PBI, con casi un 64 por ciento. Le siguen la industria, el primario y la construcción.
La comarca de Pontevedra con sus 14 concellos tiene un Producto Interior Bruto de 3.556 millones de euros.
Los tres ayuntamientos que más dinero producen, después de los Pontevedra y Marín, con 1.888 millones de euros y 420, respectivamente, son los de Sanxenxo, Poio y Caldas.
La localidad turística por excelencia de la comarca ha remontado después de 2014 y, según los últimos datos aportados por el IGE, tiene un PIB de 327 millones de euros. Son, pese a todo, 30 millones menos que en 2010. Resulta una media de 19.173 euros por habitante.
Poio, por el contrario, está de celebración, ya que aumenta su PIB un 3,7 por ciento, al pasar de 212 millones de euros a 220. El mayor incremento, en este caso, se produjo entre 2012 y 2014, de 10 millones de euros.
Caldas ha remontado en el último período de dos años, puesto que los anteriores fueron de continua bajada. Los últimos datos hablan de un PIB de 174 millones de euros, 6 menos que en 2010. Son 17.307 euros de media por habitante.
En Vilaboa el PIB es de 107 millones de euros, con una media de menos de 18.000 euros por habitante. Este ayuntamiento ha remontado desde 2014 hasta mejorar las cifras de 2010.
En cuanto a Ponte Caldelas, con un 20 por ciento más, ha pasado de tener un PIB de 73 millones de euros a acercarse a los 88. En este municipio la media de euros por habitante es de 14.321.
Barro y A Lama aportan cifras interesantes al conjunto de la comarca, con productos interiores brutos de 66 y 62 millones de euros, respectivamente. Las medias por vecino son de 17.385 y 24.265 euros.
