Con el mes de enero recién iniciado, la comarca registró ya el primer incendio del año. Alrededor de 45 hectáreas de monte, según las estimaciones que baraja la Consellería de Medio Rural, fueron pasto de las llamas en un foco registrado en el Concello de Cerdedo-Cotobade. Las llamas pusieron en vilo a los vecinos de Cavadosa, a los pies del Monte Seixo, ya que durante la madrugada de ayer amenazaron con acercarse a la viviendas de este lugar de la parroquia de Cerdedo.

Medio Rural dio ayer por extinguido este incendio forestal en torno a las 11.10 horas. Según se apuntó desde la consellería, el fuego se originó ya en la tarde del miércoles, pasadas las 16.00 horas. En su extinción trabajaron un total de seis agentes, ocho brigadas y dos motobombas. La totalidad de la superficie quemada se corresponde con monte raso.

La agrupación de voluntarios de Protección Civil de Cerdedo-Cotobade y operarios municipales colaboraron con los medios de extinción movilizados por la Xunta para controlar este incendio. Fuentes municipales subrayaron ayer que el foco se volvió en algunos momentos peligroso, amenazando seriamente con aproximarse a las viviendas. A los pies del Seixo, Cavadosa es un enclave cerdedense en el que residen pocos vecinos, que pasaron la noche entre la incertidumbre y la angustia por la cercanía del fuego.

El presidente municipal, Jorge Cubela, reconoció ayer que se encontraba ya en cama cuando recibió la alerta. Decidió acercarse a Cavadosa para apoyar a los vecinos e interesarse por las labores de extinción, permaneciendo en la zona hasta cerca de las cinco de la mañana. "Siempre que se declara un fuego es una malísima noticia para un concello rico en medio ambiente como el nuestro y todavía más cuando pueden estar en riesgo las vidas de nuestros vecinos y sus casas, por lo que, pese a la apretada agenda que había tenido, salí literalmente de la cama para estar a su lado y comprobar personalmente que no se producían daños importantes", dijo Cubela. El dirigente local aprovechó para aplaudir que finalmente no se hubiese producido ninguna afección a las viviendas y que no haya que lamentar heridos.

Cubela no quiso olvidarse de agradecer el "gran trabajo" realizado por los voluntarios de Protección Civil y por los trabajadores municipales, subrayando que su esfuerzo y dedicación "fue clave para que, en coordinación con la Xunta, se extinguiese el fuego".

Desde Cerdedo-Cotobade se subrayó ayer que el frío y la humedad jugaron a favor, ralentizando el avance de las llamas. Incidieron en que la situación hubiese sido bien distinta si este mismo foco se produce en los meses de verano.

Jorge Cubela hizo un llamamiento a la ciudadanía para extremar las precauciones, incluso en estas fechas, ante la posible aparición de nuevos focos. "Pese a las bajas temperaturas de estos días y todo lo que llovió en otoño, llevamos varias jornadas muy secas y hay que estar alerta, ya que los pirómanos, que son los que causan el 95% de los fuegos, no descansan nunca", remarcó el presidente municipal.