Alrededor de medio centenar de madres del CEP Campolongo trabajaron hasta altas horas para que en la mañana de ayer el centro escolar amaneciese ambientado como un refugio provisional para Papa Noel y sus ayudantes.
Túneles de cartón recubiertos de nieve artificial permitieron el acceso de los escolares a las aulas, que Papa Noel fue visitando de forma progresiva y entregando regalos.
Y es que en eso también la Anpa se empleó a fondo. Consiguió obsequios para los más de 500 niños que cursan sus estudios de Primaria en este céntrico colegio.
Y para sobrellevar tanta emoción, un tentempié. Desde primera hora otro grupo de padres, integrado por unas veinte personas, se encargaban de servir chocolate, con churros, a los distintos grupos. Y entre todos, elaboraron un mural inclusivo, en el que se podía leer "Feli z Navidad" en lenguaje de signos.