El Concello de Pontevedra estudia el transporte público "a demanda" en la ciudad, que además sea "aquilatado" al transporte interurbano, apuntó el alcalde, Miguel Lores, para explicar el trabajo que está realizando Pontevedra para sumarse al plan de transporte de la Xunta. Lores se mostró ayer molesto con las "amenazas" del gobierno autonómico, respecto a retirar a la ciudad fondos si no presenta su propuesta para implantar el transporte público. El alcalde indicó al respecto que "las administraciones no funcionan con amenazas, sino hablando" y en este sentido reiteró su oferta a la Xunta para negociar el plan de transporte "sin hacer partidismo marrullero".

El regidor nacionalista explicó que el Concello de Pontevedra tiene interés en llegar a acuerdos en este asunto, pero que no responderá a la Xunta "ni en diez, ni en quince días" , porque es un asunto a estudiar "con seriedad". Explicó que el Concello de Pontevedra ha querido asesorarse sobre la mejor opción para implantar el transporte urbano porque "no es serio tener un transporte público que sirva para ver pasar un autobús con un señor o dos dentro", sino un sistema que se adecue a las necesidades reales de la ciudad.

"Queremos conocer todos los datos, la financiación, las líneas, el coste... todo, antes de elegir un sistema, porque nosotros somos gente seria", indicó el alcalde, quien aseguró que en una llamada al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, le recriminó que haya "amenazado" al Concello de Pontevedra, a través de los medios de comunicación, con quitarle fondos finalistas, "Las administraciones no se relacionan así", subrayó Lores.