El Concello de Poio ultima el texto base de la que será la normativa de uso de espacios públicos que regulará las terrazas en el municipio, así como otras cuestiones como la publicidad o las muestras de comercios en a pie de calle. Los técnicos municipales ya tienen el texto base, que deberá pasar primero por la Xunta para obtener su visto bueno, antes de iniciar un procedimiento de participación en la que los vecinos podrán aportar sus propuestas antes de la aprobación definitiva, unos trámites que desde el gobierno local hacen pensar que la entrada en vigor del documento no sea afectiva hasta después del próximo verano.

Uno de los aspectos más característicos de este documento es que diferencia el conjunto histórico de Combarro del resto del municipio, lo dilató más su redacción. "Combarro tiene unas características particulares en su casco antiguo que lo hacen diferente, pero no tenía sentido hacer una normativa municipal para todo el municipio y otra específica para el Conxunto Histórico", destacaba el concejal de Facenda e Patrimonio, Xulio Barreiro. Otro de los motivos que retrasó la puesta a punto de la normativa fue el cambio en la ley de tramitación, cambiando el plazo de exposición pública por el procedimiento participativo de ciudadanos.

El documento regulará las cartelerías y exposiciones de los comercios en las calles. En este sentido, según explicaba el propio Barreiro, serán diferentes los requisitos que deberán cumplir los comerciantes del Conxunto Histórico con respecto al resto del municipio.

De este modo, la futura normativa incorpora condiciones de cartelería de publicad en Combarro en cuanto a la ocupación y el material en el que se realiza, que deberá ser más acorde con el entorno. "Pretendemos delimitar para evitar posibles abusos y permitir también el paso por la calle, pero está claro que es más fácil regularlo en una plaza que en calles que pueden tener un ancho de dos metros", explicaba Barreiro.

La normativa también afectará a las terrazas. Actualmente, al no estar regulada, su horario de cierre se sujeta al de apertura de local. El nuevo documento fija un horario de cierre para este tipo de instalaciones en plena calle, pero que será variable en función del año y de día de la semana. "Evidentemente no es igual un lunes que un sábado o en invierno que verano", matizaba el edil de Facenda e Patrimonio.

Proceso

Precisamente Barreiro mostraba no muy partidario de hacer una regulación demasiado exhaustiva porque "podría volverse confusa". De hecho, planteaba que una de las dificultades que puede tener el procedimiento participativo de ciudadanos es que puede ser muy técnica. Barreiro se mostraba partidario de agilizar la normativa a pesar de que, según los plazos que se manejan, su tramitación se realizará con las elecciones municipales de por medio.

El concejal considera que en cuestión de poco tiempo el documento se enviará a la Xunta para su aprobación inicial o para que indiquen nuevas propuestas, un plazo que podría tardar tres meses o más, antes de poder abrir el procedimiento participativo.