Los tratamientos farmacológicos también se han convertido en un artículo de lujo, junto con la vivienda o los recibos básicos del hogar, para miles de pontevedreses. La crisis económica y los recortes han provocado que sean muchas las personas que, a día de hoy, no pueden afrontar un gasto que debería ser de acceso universal. Según la Fundación Banco Farmacéutico de Galicia, alrededor de 3.360 pontevedreses, es decir, un 4 por ciento de la población, no pueden comprar los fármacos recetados por sus médicos de la sanidad pública por cuestiones económicas.

Son datos que la fundación hizo públicos ayer en Pontevedra en su presentación oficial y que son extensibles al resto de Galicia, donde serían 100.000 las personas en esa situación de precariedad y exclusión social que pone gravemente en riesgo su salud.

Para evitar esta discriminación ciudadana, o al menos frenarla, nace la Fundación Banco Farmacéutico de Galicia, que se presentó en el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Pontevedra, una entidad que se crea para ayudar a todos aquellos que no pueden hacerse cargo del copago farmacéutico.

El Concello de Pontevedra ha sido uno de los primeros en adherirse a la colaboración con esta iniciativa, tal y como confirmó en la rueda de prensa la presidenta del Banco Farmacéutico de Galicia, Noelia Romero Gómez.

"El Concello de Pontevedra está interesado y ya empezaremos a trabajar juntos", afirmó.

La colaboración se llevará a cabo a través de los Servicios Sociales municipales. El Banco Farmacéutico se pone a disposición de todos los ayuntamientos gallegos. Desde cada uno de ellos se derivará a las personas que necesiten medicamentos y tratamientos y que carecen de recursos económicos. El pago de estos fármacos se repartirá en un 50 por ciento para el banco y el otro 50 para el ayuntamiento.

En cualquier caso, no será la única colaboración institucional que el banco recibirá, ya que también lo hará con las diputaciones provinciales y la Xunta, según la fundación.

"El copago farmacéutico supone una barrera de acceso a la asistencia sanitaria, concretamente, al convertir los tratamientos farmacéuticos en un lujo y quitarle su posición de necesidad", destaca la entidad.

Para poner en marcha este proyecto se realizarán campañas entre la ciudadanía con el fin de recaudar dinero y sensibilizar sobre la pobreza farmacéutica.

73.000 euros

Por el momento, el banco cuenta con unos 73.000 euros, aunque aspira a llegar a los 100.000. Buena parte de ellos se consiguieron con el torneo de fútbol Manolo Martín, 26.000 euros. Además, el Colegio de Árbitros de Ourense donó 4.300 euros. El resto se consiguieron a través de micromecenazgo y particulares.

La Fundación Banco Farmacéutico de Galicia fue declarada de interés gallego el pasado 19 de noviembre por la Consellería de Sanidade. Serán, precisamente, el Sergas y los Servicios Sociales municipales los que determinarán quiénes son los pacientes que pueden acogerse a la ayuda de esta entidad en base a su situación económica y de salud.

Junto a Noelia Romero, completan la directiva Ramiro Carregal Rey, presidente de honor, y Jesús Busto Peteiro, director.

Ignacio Sánchez, vicepresidente del Colegio de Farmacéuticos de Pontevedra, celebró ayer en la rueda de prensa la puesta en marcha de esta iniciativa. "Detrás de un medicamento hay una necesidad. No debe haber ni una sola persona que se quede sin ella", manifestó.

Reacción desde Sanidade

Ante las declaraciones realizadas en la presentación, la Consellería de Sanidade rechazó ayer mismo una relación directa entre los medicamentos que se dejan de retirar en la farmacia y el poder adquisitivo de los ciudadanos.

La Consellería puntualiza en un comunicado que en Galicia el 4,34 por ciento de la población está exenta de pago y los pensionistas de rentas inferiores a 18.000 euros recogen más su medicación "que los pensionistas de rentas más altas".

Acerca de los fármacos con indicaciones sobre las enfermedades crónicas más relevantes y con una posología bien definida, señala este departamento que muestran unos porcentajes de adherencia a los tratamientos muy elevados, sin encontrarse diferencias significativos en este indicador entre los pacientes con un 0% de aportación y el resto.

En los presupuestos de 2019, prosigue la Xunta, Sanidade destina a Farmacia cerca de 1.200 millones, 44 más que en el presente año.