La Ronda Este, vial que comunica el nudo de O Pino con Montecelo como parte de la "circunvalación" de Pontevedra, entrará en servicio el próximo mayo. Esta obra se proyectó en 2004 en la denominada Mesa M-4 de las infraestructuras de Pontevedra. Es la primera de las obras que se finaliza de aquel proyecto que involucraba a cuatro administraciones públicas.

Las obras de esta Ronda Este, impulsadas por la Diputación Provincial y el Concello de Pontevedra, han llegado al final de su primera fase y se prevé que concluyan dentro del plazo oficial de ejecución.

De este modo, en la primavera de 2019 se podrá abrir la nueva carretera de acceso a Montecelo. Así lo explicó ayer el personal técnico, en una visita del vicepresidente provincial César Mosquera y el alcalde Miguel Anxo Fernández Lores al trazado de la nueva vía.

Según dijo el jefe de obra, el ingeniero provincial José Domínguez, en la primera fase de los trabajos -que está a punto de rematar- se marcó la traza de la nueva carretera, se hicieron los rellenos y movimientos de tierras, se abrió la cantera del acceso a Montecelo para instalar la nueva glorieta, y también se están realizando los trabajos de traslado de las torres de tensión de Fenosa.

Segunda y tercera fase

La segunda fase de la obra se iniciará en enero, cuando se prevén meter soterradas las tuberías y canalizaciones de servicios (electricidad, telecomunicaciones, gas, suministro de agua, saneamiento y pluviales), para después extender las capas de la base del firme y el aglomerado.

La tercera y última fase, ya en primavera, será la más estética y servirá para instalar la nueva iluminación, la señalización vertical y el pintado de la horizontal, así como la ejecución de la senda peatonal y ciclista. "Necesitamos un par de semanas de buen tiempo para dar un impulso grande, pero la obra está avanzada y solo queda llenar con material el inicio de la carretera -en la glorieta de O Marco-, para lo cual se va a aprovechar la piedra que se está retirando del cruce de acceso a Montecelo. Luego ya irán rápido el resto de los trabajos", apuntó el jefe de obra.

Ante el buen avance de la nueva carretera, el vicepresidente provincial César Mosquera manifestó su satisfacción por no haber sufrido obstáculos en la ejecución.

El nacionalista recordó que la Ronda Este es "una obra muy demandada y muy demorada", ya que sufrió muchas vueltas para, finalmente, ser concebida como una carretera urbana adaptada al territorio que servirá de alternativa a los tránsitos que hoy pasan por la Rúa das Pereiras y la Rúa das Olivas.

Esas vías, dijo el vicepresidente, no tienen la capacidad de absorber el tráfico que va hacia Montecelo por su escasa sección, lo que hace que la circulación esté molestando muchísimo al vecindario.

"Un ejemplo"

"Fueron bastantes años esperando que se pudiese abrir esto. Esta vía es un ejemplo de lo que deben hacer las administraciones locales, ya que a veces hacen falta infraestructuras modestas, pero no por eso menos importantes, porque son las que vertebran el territorio y permiten la movilidad", destacó.

El vicepresidente provincial explicó que de cara al futuro la nueva carretera tendrá conexión con la vía que pasará por detrás de Montecelo y salida hacia la circunvalación.

Señaló que hacer una conexión distinta -por ejemplo con la variante de Alba- supondría construir un nuevo puente sobre el río que tendría una afección y un coste que difícilmente se podrían justificar.

El alcalde de Pontevedra, Miguel Fernández Lores, suscribió las palabras del vicepresidente, destacando que esta ronda va a resolver muchos problemas de movilidad. Resaltó que la obra parte de una reunión de iniciativa del Concello en el año 2004 (la conocida como mesa M-4) en la que se dejó definida la red viaria de todas las administraciones que son necesarias para Pontevedra y la comarca. "Esta obra va muy lenta, pero es la más rápida de cuantas se plantearon. Es la primera de la M-4 que se va a ejecutar", subrayó.

La traza se inicia en la PO-542 (O Pino-Bora) a la altura de O Marco, toma dirección noreste hasta alcanzar la carretera provincial EP-0003 -en la que se construirá una glorieta de 42 metros de diámetro- y finaliza en una tercera rotonda sobre la carretera PO-532 en las cercanías del acceso actual al complejo Príncipe Felipe y Hospital Montecelo, obligando a modificar el actual cruce.

La Ronda Este tendrá una longitud de 970 metros con una calzada de dos carriles de circulación de 3,50 metros cada uno, arcenes de un metro, más una berma de 0,75 metros, cunetas de dos metros y, en el lateral derecho, una senda peatonal para ciclistas y peatones de cuatro metros de ancho.

La obra tenía un presupuesto de licitación de poco más de dos millones de euros y finalmente fue adjudicada a la empresa Coviastec S.L. por 1.557.155 euros. A esta cifra hay que añadir 1,4 millones de euros de las expropiaciones de terrenos necesarios para hacer la traza.

El proyecto tuvo que sortear muchos imprevistos desde su concepción hasta el día de hoy: en 2013 Diputación y Concello firmaron un convenio de colaboración, en el 2014 se realizó la redacción del proyecto, y en junio de 2015 se inició la licitación de los trabajos.

La adjudicación, sin embargo, tuvo que ser rescindida por defectos de la tramitación y por la necesidad de modificar el proyecto, que no incluía el traslado de torres de alta y media tensión ni las correcciones apuntadas por la Xunta de Galicia.

Finalmente, en diciembre de 2017 se inició de nuevo la licitación de los trabajos, que fueron adjudicados a finales de junio de este año e iniciados en el mes de agosto.