La Universidad recortará un 10% los fondos destinados a las facultades y escuelas en 2019 para poder acometer las mejoras de personal comprometidas por el nuevo equipo de gobierno. Los presupuestos para el próximo año son los más elevados de su historia -182,5 millones de euros- gracias a la consecución de proyectos e infraestructuras de I+D. Pero este éxito no implica la posibilidad de incrementar el gasto "a corto plazo", por lo que el equipo de Reigosa ha "reestructurado" partidas para poder afrontar el pago de "extras", reducir el horario docente y convocar concursos de nuevas plazas.

El responsable del área económica, José María Martín Moreno, explicó ayer al Claustro que el grueso de los recortes, que también afectarán a los departamentos, estará vinculado a los vicerrectorados. "He sido decano y director de departamento y somos muy conscientes de que las necesidades son ilimitadas y los recursos escasos. Podemos mantenerlos o incrementarlos un poco respecto al año anterior, o estabilizar a personas acreditadas sin plaza desde 2009, frenar que la plantilla siga bajando o reducir las 320 horas de docencia. Este equipo apuesta por el capital humano y menos por lo que se hacía hasta ahora. Tenemos ladrillo de sobra", defendió.

Equilibrio presupuestario

Asimismo, destacó que el incremento de los fondos procedentes de la Xunta está motivado por el incremento salarial impuesto por ley y que la ayuda del ministerio de 7,5 millones para infraestructuras científicas conlleva una cofinanciación del 20% que la Universidad está negociando con el Gobierno gallego.

En cualquier caso, Martín Moreno subrayó que se mantiene el equilibrio presupuestario y el superávit, así como la captación de fondos ajenos al plan de financiación autonómico. De hecho, confían en "paliar" los recortes con "ingresos adicionales" que no aparecen incluidos en los presupuestos.

El rector Reigosa se expresó en el mismo sentido para recordar que el personal es el eje de sus políticas y que Vigo aplicará la máxima tasa de reposición permitida, el 108%, "algo por lo que no pueden optar muchas universidades españolas". También dijo tener "buenas sensaciones" respecto a las negociaciones con Facenda para poder incrementar la masa salarial.

En su informe ante el último Claustro del año, Reigosa avanzó, a falta de datos definitivos, que la matrícula de nuevo ingreso supera el 100% de la oferta. Aun así el descenso de alumnos baja de forma continuada en las tres universidades y durante el primer trimestre de 2019 presentará un plan de captación de alumnos que tiene a los gallegos como primer objetivo, pero también dirigido a los de Portugal e Iberoamérica.

El próximo año abrirá la Universidad de Verano en el edificio Faraday de la ETEA con una Jornada de Pensamiento Contemporáneo que reunirá a filósofos extranjeros. Y el gobierno universitario, que ha pedido a la Xunta que agilice los trámites para reformar el inmueble, trata de ajustar el plan de obra para reducir costes.

Reigosa también anunció que "en menos de tres meses" se alcanzará un acuerdo con el Concello respecto al pago del IBI y que la Universidad podrá seguir haciendo uso de espacios en el antiguo Rectorado de Areal una vez que Zona Franca ejecute su compra.

Respecto a la futura sede de O Berbés, que avanza "a buen ritmo", aseguró que será "un magnifico escaparate" para la Universidad y que ayudará a la captación de alumnos. "Acogerá actividades que tengan más éxito en la ciudad, que en el campus. Estamos estudiando cuáles", añadió. En 2019 también se abrirá la Escuela de Posgrado y Formación Permanente, en la que se integrará el programa de mayores.

A pesar de ocupar una posición destaca en los rankings de investigación, las cifras de transferencia "perdieron cierto impulso" que Reigosa confía en recuperar con convenios con Feuga y varias asociaciones empresariales.