El Pleno celebrado en Barro aprobó el presupuesto para 2019, que asciende a 2.545.000 euros, y que tiene, según el gobierno local, un carácter eminentemente social, en el que por un lado se vuelven a congelar los impuestos y tasas, "para no grabar aun más a las economías familiares", y por otro se incrementan los recursos "para atender a las personas que más están sufriendo la situación económica actual", manteniendo la tendencia al alza de las inversiones, la transparencia, un menor nivel de endeudamiento y el equilibrio en las cuentas.

La partida económica para la Atención Social se incrementa 80.000 euros, lo que supone un 22% más que en el ejercicio anterior, llegando a los 436.000 euros; y además de seguir apostando por la mejora de los servicios básicos, por la dinamización de la vida sociocultural del municipio y la promoción económica, en este presupuesto se hace un esfuerzo especial para facilitar la formación de aquellas personas que están buscando empleo, o un empleo de más calidad.Habida cuenta la implantación de nuevas empresas, se incrementa el presupuesto destinado a financiar cursos de formación que faciliten la contratación de vecinos.

En cuanto a inversiones se consignan 331.128 euros.