La empresa Covsa será la encargada de realizar la reforma de la calle Progreso, en Sanxenxo, pese a que el análisis que han hecho los técnicos municipales de las 14 ofertas presentadas para la reforma de la calle determinó que Nexia era la ganadora del concurso con 79 puntos, seguida de Covsa con 78,73.

Sin embargo, a la hora de hacer la propuesta de adjudicación la mesa de contratación calificó de "anormalmente baja" la oferta económica presentada por Nexia, concediéndole un plazo de tres días para la justificación de ese precio. Finalmente, Nexia ha renunciado al concurso y, por tanto, la empresa adjudicataria ha sido Covsa, la segunda en puntuación.

Entre las mejoras presentadas por Covsa destacan las siguientes: Memoria técnica con un apartado en el que se expone el conocimiento de la problemática que genera la obra; así como la reducción de 4 meses en el plazo de ejecución de la obra, pasando de los 12 meses a 8 meses.

Circulación del tráfico

La empresa adjudicataria propone ejecutar cada una de las fases del proyecto por márgenes independientes, de forma que se pueda mantener siempre la circulación del tráfico en al menos un sentido de la circulación. Además, de hacer propuestas de corte de tráfico puntuales con desvíos provisionales por viales alternativos.

Asimismo, Covsa plantea medidas alternativas para compatibilizar la obra con las actividades cotidianas de la calle, zonas de aparcamiento disuasorio y una buena señalización con información del desarrollo de los trabajos, itinerarios seguros para peatones, acceso a garajes y vehículos de transporte público.

Otro apartado es la ampliación en cuatro años del plazo de garantía de la obra.

Cabe recordar que la humanización de la calle tiene un presupuesto total de 2,5 millones de euros, de los cuales un 70%, los aporta la Consellería de Infraestruturas y el 30% restante, 773.217 euros, el Concello.

La reforma abarca 1.280 metros que van desde la confluencia entre la rúa Progreso y la avenida de Madrid hasta la rotonda de Arnelas.

Objetivo

El objetivo principal del proyecto en la reordenación de los espacios para vehículos y peatones lo que conllevará la creación de dos nuevas rotondas que permitirán agilizar el tráfico en los cruces más conflictivos de la calle y la mejora de las aceras que pasarán a tener como mínimo 1,8 metros.

La mejora de la rúa Progreso contempla también dos glorietas o rotondas que permitirán agilizar el tráfico y mejorar la seguridad vial. Las rotondas son mucho más eficaces y seguras que los carriles centrales, demasiado estrechos, que ahora tiene la calle para regular sus cruces.

Rotondas

La primera rotonda tendrá un diámetro de 27 metros y se construirá al inicio de la calle, en la confluencia con la avenida de Madrid; mientras que la segunda glorieta, con un diámetro de 28 metros, se situará en el cruce entre la rúa Progreso con Castelao y la carretera de Nantes. Se trata del cruce más conflictivo que tiene la calle y donde se suelen generar importantes retenciones.

Está prevista la sustitución de la red de saneamiento y la creación de una red separada de pluviales que evitará los problemas de inundación y saturación de la vieja red. Una nueva red de abastecimiento de agua en tubería de fundición de 150 milímetros y el soterramiento de parte de la red eléctrica y telefonía.

El mobiliario incluirá tres tipos de farolas de 9, 6 y 4,5 metros de altura, bancos de granito natural y de madera tratada, papeleras y barandillas.