El camionero implicado en el incidente sucedido el pasado jueves en Lourizán aporta su propia versión de los hechos en un audio que hizo llegar ayer a través de WhatsApp a sus conocidos y que circuló durante todo el día a través de este servicio de mensajería y las redes sociales.

En la grabación se defiende y asegura que fue uno de los ciclistas el que comenzó la pelea y que le asestó un puñetazo a la vez que le llamaba "hijo de puta". Ese fue, en sus palabras, el detonante de lo que se ve posteriormente en el vídeo.

En el audio, de dos minutos de duración, comienza diciendo que no tiene enemigos: "No creo que tenga enemigos. Yo no me considero enemigo de nadie".

En él narra los hechos desde su versión, la que no había sido publicada en los medios, que sí lograron hablar con los ciclistas el día anterior.

"Oí comentarios de todas las maneras y cada uno cuenta lo que le da la gana. Yo voy a contar mi versión por si a alguien le importa", anuncia. "Los hechos no sucedieron como cuentan", añade.

Siempre en sus palabras, los dos ciclistas implicados en el incidente circulaban por la carretera vieja de Marín "a la par, muy anchos" y "de palique".

El hombre, vecino del municipio de Barro, les pitó y en cuanto un coche que venía de frente pasó, los adelantó "correctamente, sobrado". "Me olvidé de todo y ellos ni piaron ni nada de nada", asegura.

Cuando ya se encontraba maniobrando para entrar a la fábrica de Ence "entraron ellos y zapatearon las bicicletas delante del camión".

"Me vino uno como un jíbaro y se puso a darme puñetazos en la puerta y a decirme que me bajase, llamándome hijo de puta", cuenta.

Entonces, siempre según su versión, bajó la ventanilla y el ciclista en cuestión se colgó del espejo del camión y le lanzó un puñetazo. "Si me coge la cara me deshace", recalca.

Entonces bajó del camión y "del resto ya sabéis lo que pasó".

Con esta se conocen ambas versiones, ya que los ciclistas aseguraron el día anterior que simplemente se limitaron a increparle por un adelantamiento "peligroso" y que entonces el hombre cogió un martillo del interior del camión con el que intentó agredir a uno de ellos y lo consiguió con el otro.

En cualquier caso, el vídeo que se hizo viral solo recoge la última parte de la versión y queda en manos de la Policía averiguar que pasó previamente a los golpes tanto a los ciclistas como a sus bicicletas.