La Xunta ultima un proyecto encaminado a mejorar la seguridad vial en la carretera PO-225 a su paso por Alba. Consiste en una senda peatonal que transcurrirá por la zona próxima a la capilla de San Caetano y el río Rons y con la que se espera cumplir con una demanda recurrente de la Fundación Amigos do Camiño Portugués por la peligrosidad de ese vial, que obliga a los cada vez más numerosos peregrinos que siguen esta ruta a pasar algunos trechos por la propia carretera, sorteando el tráfico rodado, especialmente a su paso sobre el puente.
La conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez Mourelle, y el director de la Axencia Galega de Infraestruturas, Francisco Menéndez, dieron a conocer ayer detalles de ese proyecto, que se prevé que saldrá a información pública antes de fin de año.
Según explicaron, está previsto la construcción de la senda peatonal con una distancia de 580 metros que separará el tránsito peatonal del tráfico rodado, lo que permitirá dar una mayor seguridad a usuarios y peregrinos en un punto en el que se produce un importante embotellamiento en el entorno del río Rons por la estrechez del paso que comparten actualmente vehículos con viandantes. Precisamente por ser uno de los puntos tan frecuentados por los peregrino desde la Xunta destacaban que se trata de una iniciativa "importante" debido a los problemas de seguridad que existen actualmente.
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En la presentación realizada ayer, Menéndez explicó que la obra contempla el acondicionamiento del entorno de la capilla de San Caetano, además de la senda adicional que transcurrirá en el margen izquierdo de la PO-225 en dirección PO-531, así como otra zona, más corta, en las proximidades de las capillas. Como particularidad, en paralelo al puente del Rons, está proyectado realizar una pasarela peatonal, en el entorno del lavadero existente así como la reordenación del cruce hacia O Castrado, mejorando la visibilidad en una zona por la que los peregrinos deben cruzar la PO-225.
La Xunta prevé en esta senda una inversión de 270.000 euros y destaca que se trata de un proyecto complementario a la programada Variante de Alba, un vial para el que los presupuestos autonómicos tiene reservado una partida pero de la que no tienen plazos para su ejecución.
