El Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) fue aprobado definitivamente. La coselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda y Territorio, Ángeles Vázquez, y el alcalde, Juan Manuel Rey, firmaban esta mañana la aprobación del documento que culmina el proceso iniciado en 2003, en un acto no exento de polémica en la que el portavoz municipal del BNG, Manuel Fariña, entregaba a la responsable de la Xunta una botella de agua del río, junto con unas gafas de bucear.

"Siempre entendí que era bueno dar regalos y como es conselleira de Medio Ambiente, le entrego una botella del río con un vaso, por si quiere servirse, y unas gafas de buceo para que venga con nosotros a bucear en el encoro porque venimos aquí y no hacemos ningún anuncio importante sobre lo que es el principal problema de Caldas, que no es el PXOM en estos momentos, es un río completamente verde", indicaba el portavoz nacionalista.

"Caldas está presente en la Xunta de Galicia igual que están todos los ríos gallegos", respondía Vázquez, que asumía las competencias de Medio Ambiente hace dos semanas. "Será un tema a tratar como cualquier otro. Vengo a Caldas porque sí que es importante darle a conocer a los vecinos que, después de muchos años, van a tener una seguridad jurídica que es fundamental para los que residen y para los que van a residir y para el desarrollo del municipio", señalaba la conselleira.

Tanto Rey (PSOE), como los portavoces de los grupos municipales caldenses del PP e Independentes de Caldas, Manuel Cortés y Fernando Pérez, criticaron la actitud de su homólogo nacionalista. "Es cierto que la situación del río es un problema, pero no era el momento", coincidían.

"Que después de tantos Caldas cuente con un PXOM ha de ser gratificante para todos y ha de serlo también para el BNG y si no es así hay otros recursos. A partir de ahí se harán los trámites correspondientes y se trabajará en la línea que se tendrá que hacer a favor de los ríos gallegos", zanjaba la Vázquez, quien tras el encuentro se reunió con los portavoces de los grupos municipales y el delegado de la Xunta, Xosé Manuel Cores Tourís, para abordar la situación del río Umia tras los problemas de microcistina, la limpieza del cauce y la presencia del alga invasiva eggeria densa.

PXOM

Con la aprobación definitiva del PXOM se ponen fin a unos trámites iniciados en 2003, que contó con el visto bueno del pleno municipal en 2013, aunque no por parte de la Xunta, provocando que se tuviera que modificar con el regreso de las normas subsidiarias en 2015. En 2016, antes de la aprobación de la Lei do Solo, el Plan Xeral modificado fue aprobado nuevamente por el Concello y parcialmente por la Xunta, provocando una nueva rectificación que llevaba hoy a su aprobación definitiva.

El PXOM reserva 560.000 metros cuadrados para espacios libres y zonas verdes, lo que supone un 65% más de lo exigido en la Lei do Solo. Además, cuenta con 132.339 metros cuadrados para equipamientos comunitarios, un 16% más de lo que dicta la ley. Además prevé la ampliación de la casa do Concello y del instituto Aquis Celenis, así como la construcción de un nuevo centro de salud o el aprovechamiento de los espacios naturales que tiene Caldas en las riberas de los ríos Bermaña y Umia, posibilitando la creaci´n de parques fluviales en su entorno, tal como confirmaba la conselleira.

A pesar de que Vázquez consideraba el PXOM de "ambicioso", los grupos municipales indicaban de la importancia del proyecto a pesar de no abarca las pretensiones iniciales tales como algunas delimitaciones de núcleos rurales o incluso en lo referente al polígono industrial proyectado en Paradela, que pasa a reservar algo más de 500 mil metros cuadrados frente a los más del millón proyectados inicialmente.