Pedro Figueroa, doctor en Ciencias Económicas y Empresariales, investigador en la Universidade de Vigo y profesor destaca que en toda Galicia las cifras de microempresas son similares. "Es una realidad que está ahí. Lo que hay que hacer es apoyar a esas microempresas para que de alguna manera sean capaces de generar empleo ellas mismas, que se desarrollen", considera.

"Si cada una de ellas crease un nuevo puesto de trabajo se terminaría el paro", añade.

"El problema es que muchas microempresas no tienen esa capacidad de desarrollo. Lo que necesitan es una ayuda para que se puedan promocionar, para que encuentren productos o servicios que aporten más valor", afirma el que también es director de la iniciativa por el emprendimiento empresarial Pont-Up Store, que cada año saca a las calles de Pontevedra el talento innovador para su visibilización.

Reconoce que en el sector servicios es donde mejor se pueden dar las pequeñas empresas y comenzar su trayectoria los autónomos. "Un reflexión que podríamos hacer es por qué no se les apoya más para asegurarse su sostenibilidad en el futuro, que generaría riqueza. Eso exige políticas de apoyo centradas en este tipo de empresas", manifiesta.

En este sentido, apunta que el espíritu emprendedor existe, tal y como queda patente con cada nueva edición del Pont-Up Store. "Si se le dedica tiempo, cariño y atención, la gente lo agradece y se anima. Hay que animarles porque los inicios son muy difíciles siempre y suelen ir acompañados de poca orientación", asegura Figueroa.

"En nuevo emprendimiento nosotros nos vemos obligados a dejar fuera de cada tres candidatos a dos. Eso significa que existe potencial para el emprendimiento y el desarrollo de iniciativas. Lo que pasa es que hace falta que cuenten con más ayuda de la que tienen ahora", insiste el profesor.