La empresa Setex Aparki, concesionaria del servicio de la grúa desde 2015, ha solicitado al Concello el abono de unos 150.000 euros anuales, cantidad que, según sus cálculos, ha dejado de ingresar desde el inicio de la concesión en cada ejercicio por la falta de enganches con respecto a sus cálculos iniciales.

Así, sobre una previsión de unos 580.000 euros anuales de ingresos, en 2015 recaudó unos 149.500 euros menos y en 2016, alrededor de 156.000 euros, lo que supone unas pérdidas entre el 25 y el 26%.

Ante la petición al Concello de que las arcas municipales cubran ese déficit, el gobierno local responde que el 20% de cada caída de ingresos debe ser asumido por la concesionaria como "riesgo y ventura" de la actividad, por lo que solo está dispuesto a abonar las pérdidas a partir de ese porcentaje, es decir, una media de unos 35.000 euros por año, el 25% del déficit total.

Así, para 2015 ya se ha acordado el abono de 33.700 euros y otros 40.400 por 2016.

El contrato vence dentro de un año, en diciembre de 2019, y el gobierno local asegura que no se revisarán las tarifas, situadas ahora en 115 euros por enganche.