"Cuando The Guardian dijo que la playa de Rodas era la mejor del mundo, todos aplaudimos, ¿por qué no hacerlo ahora si ejercemos de pontevedres? No entiendo las críticas, ni siquiera aunque se haya sobrevalorado el modelo de ciudad de Pontevedra, igual que se sobrevaloró entonces la playa de las Cíes", reflexiona Miguel Lago, presidente del Centro Comercial Urbano Zona Monumental.

"Estoy encantadísimo de que se hayan acordado de Pontevedra", reconoce.

Como portavoz del tejido empresarial que forma parte del casco histórico, que incluye desde el pequeño comercio local con solera hasta decenas de locales de hostelería, considera que el modelo de ciudad ha beneficiado a los diferentes negocios. "El hecho de poder comprar plácidamente, paseando, siempre es bueno. Si en la Praza de Curros Enríquez, por ejemplo, se pudiese seguir aparcando como en los años ochenta, no habría la actividad tanto comercial como hostelera que hay ahora, con las terrazas", afirma.

"Este sistema está funcionando. Lo que ocurre es que hay circunstancias económicas y comerciales que pueden desvirtuar el tema, pero el hecho de que las grandes cadenas estén acabando con el comercio local no tiene nada que ver con el modelo de ciudad", asevera Lago.

"Volver atrás, a lo que ya vivimos sería una locura", concluye.

"Que venga más gente"

Del mismo modo se manifiestan los hoteles de la ciudad. Su portavoz, Paula Lourido, asegura que "todos están encantados" con el modelo de ciudad. "Consideran que su fama mundial solo puede repercutir económicamente de forma beneficiosa sobre la ciudad, así que esperan que traiga a más gente a visitarla", indica.

Respecto a los accesos en coche a este tipo de establecimientos, afirma que "hace año quizá la gente comentaba que podían tener dificultades, ahora ya no, hay que pensar que muchos de los clientes son peregrinos que vienen a pie".