La fama de Pontevedra no tiene fronteras. Si el modelo de ciudad ha viajado ya a países como México, Dubai, Singapur, China o Brasil, ahora es el prestigioso periódico británico "The Guardian" el que se ha fijado en la Boa Vila. El periodista Stephen Burgen firma el artículo "Para mí, esto es el paraíso": la vida en la ciudad española que prohibió los coches.

"La gente no grita en Pontevedra, o gritan menos". Así comienza el reportaje que ayer publicó "The Guardian". En el texto, su autor destaca que los sonidos producidos por los automóviles han sido reemplazados por los de los cantos de los pájaros sobre las camelias, el chocar de las cucharillas de café en las tazas de las terrazas o las voces de la ciudadanía disfrutando de la calle.

El periodista visita la ciudad acompañado del alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, que le recibe desde la casa consistorial y abre la ventana de su oficina invitándole a agudizar el oído. El nacionalista le cuenta que precisamente en esa calle, Michelena, por la que ahora las familias pasean relajadas, antes pasaban cada día 14.000 coches. "Su filosofía es simple: tener un coche no te da el derecho de ocupar el espacio público", asegura Burgen acerca de Lores.

En su artículo destaca que el alcalde lleva al frente de la ciudad desde 1999, después de 12 años en la oposición, y que fue en ese año cuando comenzó la peatonalización de la ciudad, comenzando por el casco viejo. Lores explicó al británico que "el centro histórico estaba muerto, con drogas y lleno de coches, era una zona marginal". "Después llegó la peatonalización en el centro de la ciudad y se construyeron los parkings subterráneos y los descubiertos en la periferia, con 1.686 plazas libres", escribe.

Encabeza los beneficios que este modelo de ciudad ha proporcionado, subraya "The Guardian", el descenso radical de muertos por accidente de tráfico, ninguno desde el año 2009. Asimismo, la contaminación por CO2 ha caído un 70 por ciento y "el centro de Pontevedra ha ganado 12.000 nuevos vecinos".

El artículo no podía terminar sin apuntar que Pontevedra es la ciudad natal de Mariano Rajoy, que, sin embargo, "nunca ha mostrado interés por un modelo urbano que ha ganado numerosos premios". También señala que la perpetuidad del BNG, un partido de izquierdas, ya es "una rareza en una región del noroeste sólidamente de derechas", Galicia.

Stephen Burgen cuenta, asimismo, en su reportaje con los testimonios de vecinos de Pontevedra. Así, el arquitecto Rogelio Carballo asegura a "The Guardian" que "la ciudad es perfecta para la peatonalización, puedes cruzarla entera en 25 minutos". "Hay cosas que podrías criticar, pero no hay nada que te pueda hacer rechazar este modelo de ciudad", añade.

Pero como no todo es perfecto, se incluyen también las críticas a la nueva Pontevedra, como los atascos que se forman a primera hora de la mañana en las pocas calles que permiten la circulación rodada. Pese a todo, aquellos que anteriormente han vivido en ciudades grandes como Madrid o Valencia agradecen la suerte de "poder ir andando a todas partes". Un lujo.